7,6 millones de euros (de los que Europa financia el 60%) promoverán acciones en 12 municipios sorianos. Daniel García, diputado de Fondos Europeos, ha desgranado los principales ejes del proyecto 'Sendas sostenibles': "digitalización del turismo como elemento vertebrador, recuperación patrimonial en los pueblos y el fomento de los centros sociales como lugar de reunión".
La Diputación Provincial de Soria ha conseguido una adjudicación provisional de más de 4,6 millones de euros procedentes de fondos europeos. Este capital impulsará el proyecto 'Sendas sostenibles. Soria-12', una iniciativa diseñada para transformar el sector turístico de la provincia a través de la digitalización, la recuperación del patrimonio y la cohesión social, implicando a una docena de municipios con Almazán como cabecera.
El diputado de Fondos Europeos, Daniel García, ha desgranado los detalles de una subvención que llegará a la provincia tras una reclamación de la institución provincial. Y es que Soria era la única provincia de España que quedaba fuera de estas ayudas por no tener ningún municipio, salvo la capital, de más de 10.000 habitantes. La Diputación pidió que se considerasen áreas funcionales con cabeceras de más de 5.000 habitantes, una modificación que ha permitido incluir a la provincia y que ha culminado con la aprobación de este proyecto.
La iniciativa, que solicitó un total de 10 millones de euros, ha recibido finalmente una asignación de 7.648.000 euros. De esta cantidad, más de 4,6 millones (el 60%) provienen directamente de los fondos europeos, mientras que el 40% restante será cofinanciado por la propia Diputación y los ayuntamientos participantes. "Es un proyecto que cohesionará toda la provincia con el sector turístico como eje vertebrador", ha afirmado García.
El proyecto se articula en torno a tres ejes fundamentales que buscan modernizar la oferta turística y, al mismo tiempo, "fortalecer el tejido social del medio rural", ha destacado el diputado de Fondos Europeos. El objetivo "utilizar el turismo como motor de desarrollo en todas las comarcas, desde la Ribera hasta el Moncayo o Pinares, aprovechando la dispersión geográfica como una oportunidad para crear una red cohesionada", ha añadido García.
El primer pilar es la digitalización del sector turístico, al que se destinará aproximadamente el 30% del presupuesto. Se está "pensando en oficinas de turismo que sean digitales para conseguir una experiencia más para el visitante, también en disponer de una plataforma única para el registro de turistas". Esta plataforma buscará involucrar activamente al sector de la hostelería y a los comercios locales para generar un "ecosistema digital común que beneficie a todos los actores implicados", ha señalado García.
El segundo eje se centra en la recuperación y puesta en valor del patrimonio. Esta área estará conformada por los municipios de Almazán, Berlanga de Duero, Burgo de Osma, Gormaz, Medinaceli, Molinos de Duero, Monteagudo de las Vicarías, San Esteban de Gormaz, Vinuesa, Yanguas, La Cuenca (Golmayo), y Muro (Ólvega). Se prevén actuaciones en todos para la rehabilitación de enclaves emblemáticos.
Finalmente, el tercer pilar es la cohesión social y territorial, materializada en la mejora y creación de centros sociales. Este apartado del proyecto responde a la "necesidad de contar con espacios de encuentro que dinamicen la vida en los pueblos y barrios". Se han planteado intervenciones en localidades como Medinaceli, San Esteban de Gormaz o Vinuesa, así como la adecuación de otros centros que actualmente no se encuentran en condiciones óptimas. El objetivo es "fortalecer los lazos comunitarios y ofrecer a los residentes lugares para compartir tiempo y actividades, combatiendo el aislamiento en el medio rural", ha apuntado Daniel García.