En esta campaña se insiste en la prudencia ante la posibilidad de fenómenos meteorológicos adversos que pueden afectar a las calzadas. También se incide en evitar el consumo de bebidas alcohólicas antes de ponserse al volante.
La Dirección General de Tráfico inicia este viernes un operativo de vigilancia que se extiende hasta el próximo 6 de enero. Las autoridades insisten en la prudencia ante la posible aparición de nieve o hielo y recuerdan la importancia de evitar el consumo de bebidas alcohólicas antes de conducir.
El operativo especial de regulación y seguridad arrancará mañana, viernes 19 de diciembre, a las 15:00 horas y permanecerá activo hasta la medianoche del martes 6 de enero de 2026. El objetivo principal es garantizar la fluidez y la seguridad vial en unas fechas marcadas por el aumento de la movilidad hacia segundas residencias, zonas de montaña y áreas comerciales.
Según las estimaciones oficiales, en Castilla y León se prevén más 2,4 millones de desplazamientos por carretera durante el periodo navideño. Para gestionar este volumen de tráfico, se movilizarán todos los medios humanos disponibles, incluyendo agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y personal de los Centros de Gestión, apoyados por medios técnicos como helicópteros, drones y cámaras de control.
El dispositivo se desarrollará en tres etapas diferenciadas para cubrir los momentos de mayor afluencia circulatoria:
Para facilitar la circulación, Tráfico ha previsto la instalación de carriles reversibles y adicionales mediante conos en las horas punta. Asimismo, se paralizarán las obras que afecten a la calzada, se limitará la celebración de pruebas deportivas y se restringirá la circulación de camiones de mercancías en tramos y horarios específicos.
La vigilancia se intensificará con radares fijos y móviles, así como con furgonetas camufladas para controlar el uso del cinturón de seguridad y las distracciones con el teléfono móvil. En la DGT hacen especial hincapié en tres factores de riesgo: la incompatibilidad del alcohol y la conducción, el peligro de los trayectos cortos y nocturnos típicos de estas fechas, y la necesidad de adaptar la conducción a las condiciones meteorológicas adversas como niebla, hielo o nieve.