Alrededor de 40 piragüistas participaron el pasado día 24 en la tradicional colocación del belén en el río Duero, en la capital, en una de las jornadas con más participación que se recuerdan en este acto, seguramente animados por la buena climatología. Son más de 30 años los que se llevan realizando este sencillo pero emotivo acto, y en alguno de ellos tuvo que remarse sobre el río helado. El belén se colocó en la isleta que hay frente al paraje conocido como El Peñón. Los piragüistas se concentraron en el Sotoplaya, para remar río arriba, por el puente de piedra.
Alrededor de 40 piragüistas participaron el pasado día 24 en la tradicional colocación del belén en el río Duero, en la capital, en una de las jornadas con más participación que se recuerdan en este acto, seguramente animados por la buena climatología. Son más de 30 años los que se llevan realizando este sencillo pero emotivo acto, y en alguno de ellos tuvo que remarse sobre el río helado. El belén se colocó en la isleta que hay frente al paraje conocido como El Peñón. Los piragüistas se concentraron en el Sotoplaya, para remar río arriba, por el puente de piedra.