Asden ha alegado contra el permiso de investigación de hidrocarburos denominado ‘Edison’ que según aseguran se trata de un proyecto de extracción por fractura hidráulica, el cual, “lejos de ser un método convencional de extracción de petróleo o gas es un método altamente nocivo para la salud humana y ambiental” explican, añadiendo que este tipo de daños lo son “especialmente por lo agresivo de las técnicas que utiliza y por las afecciones a los acuíferos por contaminación con sustancias tóxicas y peligrosas que permanecen en el subsuelo durante siglos”.
En su análisis, Asden detalla que se verá afectados 770 kilómetros cuadrados de la provincia de Soria, es decir un 7,6 % de su superficie. El número de municipios afectados es de 45, afectando a 89 localidades “que van desde Garray hasta San Felices”. Cabe señalar que otros cuatro proyectos como éste se encuentran en tramitación junto con otro que significan “está aprobado para una zona al Sur de Almazán que llega hasta la provincia de Guadalajara” y que lleva el nombre de 'Cronos'.
Así mismo, denuncian que “una vez más se observa la opacidad en la información que se ofrece” por parte de la Administración, ya que aseguran que no hay documentación ni descripción del proyecto “que permita conocer las características ni el alcance ni las afecciones” del mismo, lo cual “impide totalmente el ejercer el derecho legitimo de formular oposición quienes se consideren perjudicados en su derecho”, aludiendo a lo recogido en el BOE.
Igualmente, inciden en que “la forma en que describe el territorio sujeto a solicitud de investigación también brilla por su falta de transparencia, ya que utiliza las coordenadas geográficas y omite las provincias y términos municipales afectados”.
Tal y como hicieran en anteriores ocasiones, las alegaciones presentadas también están informando y solicitando a los ayuntamientos afectados que obren del mismo modo aleguen “y que aprueben acuerdos de gobierno en los que se muestren contrarios a este tipo de proyectos”. Por supuesto nos dirigiremos a todas aquellas asociaciones y entidades sociales a las que tengamos acceso para informarles y para recabar su apoyo y colaboración. En este sentido consideran que la trascendencia y consecuencias negativas de este tipo de proyectos “trascienden el ámbito de lo que es una asociación ecologista como Asden, y tanto directa como indirectamente afecta negativamente a todo tipo de personas, entidades e intereses como son: turismo rural, actividades agrarias y ganaderas, salubridad del agua, impactos en el paisaje, futuras explotaciones mineras, etc”.