El defensa central José Antonio Culebras llegó a un acuerdo con el Numancia para rescindir su contrato y desvincularse así de la entidad soriana. Uno de los jugadores más queridos de la afición se marchó sin poder despedirse como le gusta a un futbolista, sobre el terreno de juego. Culebras aseguró que su salida es con “mucha pena pero sin rencor” y es que su marcha se debe a aspectos deportivos del entrenador Pablo Machín quien no contaba con el de Puertollano “no guardo ningún rencor a nadie en un club que es uno de los claros ejemplos del fútbol español”.
Culebras llegó a Soria hace doce años y tras sus buenas temporadas en el Numancia fichó por Levante y Tenerife, regresando a su casa años después. Fue el primer fichaje de Palacios como director deportivo por eso “pido perdón a la gente que confió en mí, como por ejemplo a César Palacios que depositó su confianza en mi persona siendo su primer fichaje como director deportivo. Vine al Numancia con mucha ilusión pero el fútbol es muy caprichoso” aseguró el defensa quien manifestó “tirar para adelante” y luchar por su futuro, ya que en unos meses será padre por primera vez, y encima de mellizos.