Carlos Martínez Mínguez, alcalde de Soria, ha insistido este viernes 2 de agosto en que el modelo de ciudad que se pretende desarrollar por parte del Ayuntamiento no contempla un túnel para el tráfico rodado en la calle Ferial con salida a Alfonso VIII. Por ello, ha vuelto a remarcar que no realizarán esta obra.
Con todo, incidió en que hay estudios sobre la cuantía económica que podría suponer esta obra, diciendo que “el papel lo aguanta todo” en referencia al coste proporcional a la longitud de dicho paso subterráneo para el tráfico rodado. Sin dar cifras, reseñó que “depende de dónde se coloque la boca del túnel tendrá un mayor o menor coste económico” ya que ello está en función del desvío de los servicios instalados en el subsuelo en una opción que varios colectivos han pedido abrir para instalar dicho túnel. Los últimos reclamantes han sido los taxistas y también Izquierda Unida (IU) esta misma semana.
“No vamos a desviar ni despilfarrar ni un solo euro en la ejecución de un túnel que es absolutamente innecesario”, dijo, en un planteamiento “clarísimo” por el que “no se gana nada” en su realización.
También explicó que el Consistorio no está en condiciones de afrontar esta obra, que perjudicará el comercio y el tránsito a pie por zonas “históricas y patrimoniales” que se pretenden recuperar con el plan de peatonalización del centro.
En cuanto a la denuncia que hacía ayer el coordinador de IU, Enrique García y en la que apuntaba a la “improvisación” con la que se están efectuando las obras, Mínguez explicó que nunca ninguna actuación de este tipo se había planificado con tanto detalle como esta, y aludió a l Consejo Sectorial de Urbanismo donde los agentes sociales dieron el visto bueno a la previsión y a la ejecución de las labores que ahora se están efectuando en un buen número de reuniones.
Por último, apuntó al PP, que se ha sumado a las solicitudes de FOES y de los taxistas sobre el túnel, asegurando que este asunto supone para la oposición “el tema del verano” porque consideró que la peatonalización supondrá un rédito electoral para el equipo de Gobierno y por ende, pérdida de votos para los populares. Ante esta opinión, el regidor les acusó de tratar de sacar ganancia a “río revuelto” de una polémica que siempre ha dado por zanjada. Aquí también puso en evidencia al Partido Popular por ir a remolque en este proyecto y por no haber sido capaces ni de apoyarlo ni de haberlo materializado “en 25 años de Gobierno municipal” algo que sí han hecho los socialistas y más “en estos tiempos de crisis”, zanjó.