El Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) desarrollará a lo largo de este año una plataforma ‘software’ que permitirá medir de forma remota las compensaciones de gas de efecto invernadero. El trabajo está dentro del proyecto ‘Ecommontech’, y con él se intenta realizar una medición “precisa y un seguimiento de las absorciones de carbono en distintos reservorios”, según explicó a Ical el gerente del Cesefor, José Luis Alonso.
El responsable del Centro destacó que las mediciones se realizarán en la masa arbórea que está en el aire, la más subterránea (raíces), la hojarasca y la madera muerta. “Tenemos varios modelos ya configurados que se aplicarán a ese software para las mediciones respectivas de ese efecto. En Castilla y León las mediciones se realizarán en el monte Urbión”, señala Alonso.
Indicó que el proyecto servirá para conocer cuál es el efecto de sumidero de carbono de las masas forestales, ya que en la actualidad no está contabilizado, en el afán de que los organismos internacionales reconozcan este extremo y se inicie el proceso para que se compense económicamente. “Actualmente, se contabilizan los derechos de emisión, pero igual que se penaliza al que emite, no recibe compensación alguna quien absorbe”, precisó, para argumentar que se busca la fórmula que establezca la cantidad de toneladas del CO2 que absorben las masas forestales.
El responsable del Cesefor recordó que la compensación serviría para mantener los bosques y montes, en un momento en el que debido al detrimento económico es cada vez más difícil llevar a cabo actuaciones silvícolas. El ‘software’ que medirá la cantidad de CO2 que absorbe las masas forestales estará listo antes de que finalice este año.