Los trabajadores sociales están realizando movilizaciones y propuestas instando a las autoridades políticas y al Gobierno central a actuar de manera urgente, para garantizar las condiciones básicas de atención a toda la ciudadanía.
Los trabajadores sociales explican que, por un lado, se está organizando el movimiento de protesta social llamado Marea Naranja, vistiendo los viernes una camiseta de este color, en defensa de los servicios sociales públicos, que surgió como respuesta al recorte del 45% del Plan Concertado de Prestaciones Sociales Básicas
Por otro lado, el pasado día 10 de julio, se presentaron las resoluciones del Debate sobre el Estado Social de la Nación, que tuvo lugar en Madrid los días previos. Este debate se organizó por la Asociación de Gerentes y Directores de Servicios Sociales, dado que el Gobierno no ha querido programar el debate correspondiente en el Parlamento. En él participaron diversos partidos políticos (el PP no quiso asistir), expertos, agentes sociales, asociaciones del tercer sector y el Consejo de Trabajo Social.
El Colectivo de Trabajadores Sociales de Soria, como miembro activo de estas iniciativas, quiere exponer a la sociedad soriana su rechazo frontal a los recortes sociales (tanto en sanidad, atención a la dependencia, educación y servicios sociales) que se están llevando a cabo, "puesto que consideramos que van a generar mayor vulnerabilidad social y bolsas de exclusión social, que nos llevan irremediablemente a un retorno a la beneficencia, en lugar de a unos servicios públicos sociales, sanitarios y educativos como derecho de ciudadanía.
El colectivo de los trabajadores sociales denuncias las siguientes actuaciones:
-El recorte brutal del 42% del Plan Concertado para prestaciones Sociales Básicas, que junto con la futura reforma de la Ley de Bases de Régimen Local va a producir una reacción en cadena de privatización de servicios sociales (guarderías, residencias de mayores…) y el retorno de la beneficencia municipal.
-Ampliar a dos años el plazo de las autonomías para dar las ayudas por la dependencia sin tener que pagar la retroactividad. Es una forma encubierta de congelar la entrada de nuevos dependientes. Además, con la demora, muchos de ellos morirán antes de haber recibido una ayuda.
-La decisión de retrasar un año más, hasta 2015, la incorporación de nuevos dependientes moderados al sistema. Esta decisión acabará colapsando los servicios sociales de los ayuntamientos, cuya partida destinada a Servicios Sociales ya sufrió un recorte del 42% en los Presupuestos Generales del Estado.
-Reducir al menos un 15% la paga a las cuidadoras familiares y anular la cotización a la seguridad social. Esta medida supondrá un castigo a las mujeres, ya que son el 98% de los cuidadores familiares informales.
-El copago en los servicios de salud para enfermos crónicos. Esta medida puede generar problemas de acceso o adherencia al tratamiento de los enfermos crónicos.
-La exclusión de ciertos sectores de población en la sanidad pública. Muchos estudios demuestran que la salud de la población es mejor en las sociedades igualitarias.
-Rescates económicos a los bancos para su saneamiento y rescate, mientras no se regula el saneamiento de particulares y familias sobreendeudadas, que se ven avocadas tras perder su vivienda a la marginalidad.
-El recorte de las partidas que reciben las asociaciones sociosanitarias y el tercer sector para el desarrollo de programas. Este llevará implícito la merma de la atención de personas con discapacidad, personas con enfermedad mental, personas mayores e infancia…, pudiendo llegar a hacer inviable la continuidad de su inestimable labor.
El Colegio Oficial de Trabajo Social de Soria espera que los responsables políticos recapaciten sobre estas medidas y en la búsqueda del interés general y del bienestar de sus ciudadanos, para no retroceder en la atención y derechos sociales que hemos conseguido en los últimos 30 años.