El año climatológico ha propiciado un retraso en las cosechas que puede ser muy beneficioso para especies como la codorniz.
El próximo día 15 comienza la "Media Veda". El año climatológico ha propiciado un retraso en las cosechas que puede ser muy beneficioso para especies como la codorniz, con un excelente año de cría, pudiéndose encontrar en abundancia en los lugares donde no se haya alterado significativamente el hábitat.
Demasiados rastrojos en que la altura, el picado de la paja o su retirada no favorecen la estancia de la pequeña africana, obligándola a movimientos en busca de mejores espacios donde las cosechas aún sigan en pie. En Castilla y León, por su enorme extensión, existen zonas muy diferenciadas; regadíos, altos paramos y montaña donde la codorniz encuentra óptimos lugares para su desarrollo aún a pesar de los productos fitosanitarios, las cosechas cada vez más tempranas, la mecanización muy agresiva en su laboreo, el cosechado nocturno y otros peligros que ponen demasiadas trabas a su estancia.
Este año, con trigos, centenos y cebadas muy desarrollados, regados por las abundantes lluvias que además han colaborado en limpiar el campo de los abundantes pesticidas, la codorniz dispone del escenario ideal para su reproducción. Tenemos que recordar a todos los titulares cinegéticos que la apertura y cierre de la veda proporciona en el mejor de los casos, veinte días de caza, suficientes jornadas para retrasar la apertura de la veda en estas zonas norteñas de Burgos, Palencia y León donde aún quedan en pie numerosas parcelas que ofrecen inmejorables condiciones para la acogida de las codornices en sus movimientos.
La Federación de Caza, reivindicando como siempre el derecho de cada coto a su autogestión, apoya y recomienda en este caso el retraso de la apertura en las zonas norteñas de las provincias de Burgos, Palencia y León.
No está de más recordar que el cupo de este año es de treinta codornices, una más de las condiciones impuestas por algunos grupos ecologistas. Medidas arbitrarias en una Comunidad tan extensa y heterogénea como la nuestra, que para nada contribuyen a combatir los verdaderos problemas de la fauna menuda en nuestros campos.
La Torcaz sigue gozando de un incremento en sus poblaciones en todas las provincias y seguro que proporcionará unas buenas jornadas en sus desplazamientos diarios en busca de comida. Cada vez son más abundantes incluso en entornos urbanos.
La Tórtola, siempre exquisita a la hora de buscar alimento, tiene a su disposición cada vez menos semillas silvestres, eligiendo las amplias parcelas de girasol. Según estas vayan madurando podremos tener más o menos abundancia de las pequeñas acróbatas del aire. Cuando sientan el relente de los últimos días de agosto se pondrán en marcha hacia cuarteles más cálidos, proporcionando días de pasos entretenidos aunque difíciles de prever.
Por último, recordar poner mucha atención hacia nuestros auxiliares caninos. Dosificar el esfuerzo en las primeras salidas para evitar golpes de calor, paciencia en sus primeras carreras detrás de las africanas, y control para evitar molestar las numerosas polladas de perdiz que estamos viendo en nuestros campos y por el retraso que estos pollos tienen en su desarrollo.