El Ministerio de Fomento ha recibido, una vez concluidas, las obras de remodelación de la Playa Mayor de Almazán, en Soria. La actuación se inscribe en el programa de Actuaciones en conjuntos urbanos y rurales y recuperación de espacios públicos de la Secretaría de Estado de Vivienda y Actuaciones Urbanas. El Ministerio de Fomento ha financiado íntegramente la intervención con una aportación de 2,45 millones de euros. En los próximos días, el Ministerio enviará al Ayuntamiento toda la documentación de la obra ejecutada así como la valoración de los daños producidos por la falta de medidas de protección por parte del consistorio durante la celebración de las pasadas fiestas de la localidad, para que proceda a su abono.
La intervención, de aproximadamente 6.900 m², se ha centrado en la recuperación de los valores históricos de la Plaza y su relación con el entorno monumental y paisajístico en el que se ubica. Para ello se ha llevado a cabo una reordenación espacial de la misma y actuaciones en pavimentación, iluminación, renovación de instalaciones, mobiliario, etc. Así, a través de la topografía, el mobiliario, las trazas y el tipo del pavimento, la Plaza consolida la configuración original del “cuadrilongo” y recupera espacios propios como “la rinconada”. El área destinada al vehículo rodado se ha reducido, aumentando el espacio público para el viandante y el entorno monumental reconquista el protagonismo histórico que había perdido con el paso de los años.
La remodelación se ha completado resolviendo puntualmente áreas del entorno inmediato. Se ha creado una nueva escalera que conecta la Plaza Mayor con la Ronda del Duero, resolviendo así la diferencia de cotas y la conectividad entre estos dos ámbitos. A su vez, el diseño compositivo de la escalera se dibuja en el paisaje extramuros como un lienzo de muralla que viene a completar el trazado de la muralla histórica.
También se han generado dos nuevos miradores, uno en el Postigo de San Miguel de la Muralla, con acceso desde la Plaza Mayor y con vistas al paisaje; y otro sobre el río Duero, con acceso desde la Ronda del río y que viene a completar la actuación en las zonas perimetrales. La elección de la madera como material principal y el uso de una estructura volada que minimiza el contacto con las edificaciones existente han permitido la integración respetuosa de estas nuevas construcciones en la perspectiva histórica de Almazán.