El equipo soriano ha desempeñado ya este papel en el tramo final de la competición, con una victoria a domicilio frente al Hércules de Alicante y una derrota ante el Almería. Ahora espera conseguir otro triunfo ante el Alcorcón, que le certifique como uno de los mejores equipos de la competición en casa.
Los de Pablo Machín aspiran además, en este balance numérico, a alcanzar los sesenta puntos en la clasificación final y conseguir la octava plaza, unos números que supondrían mejorar los registros obtenidos por el Numancia en las dos últimas campañas, con Juan Carlos Unzué y Gonzalo Arconada en el banquillo.
Con Unzué, el equipo soriano se quedo en los cincuenta y siete puntos y la décima posición mientras que con Arconada, en su segunda etapa en el Numancia, se sumaron 59 puntos y se consiguió la octava plaza final. En su primera experiencia en Soria, el entrenador donostiarra logró que el Numancia fuera campeón de la categoría y sumase 77 puntos.
El Numancia sólo ha superado la barrera de los sesenta puntos en la Liga Adelante -si se exceptúan los tres ascensos directos- en la campaña 2004-2005, con Andoni Goikoetxea en el banquillo.
Será además un partido para las despedidas, entre ellas las del gallego Nano, reconvertido en Soria a lateral izquierdo, y que la próxima campaña jugará en Primera División con el Atlético Osasuna.