El presupuesto de la Diputación de Soria para el año en curso se reducirá en un 20 por ciento con respecto a 2011, por lo que las cuentas provinciales se situarán en 46,4 millones de euros, según anunció el presidente de la institución provincial Antonio Pardo.
La rebaja de las cuentas provocará que el volumen de inversiones también descienda, según las primeras estimaciones de los técnicos del área económica que tendrán que elaborar las cuentas sin las aportaciones del Estado para la convocatoria del Planes Provinciales.
A este respecto, Pardo subrayó que la institución prevé que los municipios puedan acogerse a la citada convocatoria, siempre y cuando justifiquen la necesidad y prioridad de las obras que planteen. Las cuentas se aprobarán en junio, teniendo en cuenta las aportaciones de la Junta de Castilla y León.
La Diputación prevé este año acometer la conexión viaria Caracena-Valderromán con la ayuda de la Dirección de Desarrollo Rural del Ministerio de Medio Ambiente. En un principio se prevé realizar un camino rural, para más tarde convertirlo en una carretera asfaltada de la institución.
Además, también estima que se acogerá a la convocatoria de ayudas a la reindustrialización del Ministerio de Industria con el fin de apoyar a las industrias agroalimentarias de la provincia a través del proyecto Saborea Soria y apoyar económicamente a nuevos emprendedores.
En lo que respecta a la liquidación del presupuesto del ejercicio anterior, el resultado presupuestario fue de 4,9 millones de euros; el remanente de tesorería se elevó a 9,7 y el ahorro neto, a 7,2 millones de euros. La deuda viva ascendió a casi 20 millones de euros, lo que supone una carga financiera del 47 por ciento, cuando la Ley permite un endeudamiento de hasta el 75 por ciento de los recursos propios. Los datos reflejan que la institución es una administración viable y razonable que permite afrontar el futuro con tranquilidad, concluyó.