Mediante un comunicado FOES matizó que rechaza totalmente la huelga general convocada para el día 29 de marzo por considerarla “injusta, insolidaria y de carácter estrictamente político, pues se plantea contra una norma aprobada por el Gobierno de España y posteriormente refrendada por el Congreso y el Senado, según el marco constitucional y legislativo de nuestro país”.
En este aspecto, FOES considera que “en democracia existen instrumentos reales, como es el derecho al voto, para que los ciudadanos manifiesten su conformidad o disconformidad con las distintas opciones políticas. A su vez, en temas sociales existen cauces como el diálogo social para solventar diferencias en materia de empleo y de actividad económica. Si bien la huelga se convoca contra el Gobierno de España, los empresarios son receptores pasivos de la misma, y por ello, son quienes sufrirán las consecuencias de forma directa, tanto por el coste productivo que asumirán, como por los daños materiales que se ocasionen”.
En este sentido, en una situación de crisis especialmente crítica como la que estamos viviendo, desde FOES se reclama “respeto al derecho a trabajar a la vez que califica esta huelga de irresponsable, totalmente inoportuna, inútil y sobre todo, enormemente dañina para la actividad económica y para las empresas de nuestra provincia; además de tremendamente perjudicial en materia de imagen exterior de España, pues influirá negativamente en la confianza y credibilidad de los inversores extranjeros”.
FOES ha remitido a todos sus asociados una circular informativa en la que se recoge tanto la valoración de la Federación como el protocolo de actuación a seguir por las empresas ante la huelga general.