La Alianza por la Unidad del Campo que engloba a las organizaciones UPA y COAG señaló este martes 29 de enero que la Junta es la beneficiaria del aplazamiento de la PAC. Un hecho por el que no mostraron su extrañeza ante la postura de la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, “en su satisfacción por el retraso de un año” en la entrada en vigor de la nueva política agraria comunitaria (PAC) hasta 2015, tras reconocerlo oficialmente el comisario de Agricultura Dacian Ciolos en el pasado Consejo Consultivo de Política Agrícola para Asuntos Comunitarios.
“Este aplazamiento sólo beneficia a la Administración regional, que para nada a los agricultores y ganaderos de nuestra provincia, puesto que la prórroga de un año más sólo se contempla para el Pago Único y para nada a los programas de desarrollo rural (ayudas agroambientales y programas Leader y Proder), de esta manera la Junta se estaría ahorrando un año más la aportación que le corresponde realizar en estas medidas de acompañamiento”, explicaron.
Por ello, consideraron como “lamentable” el que nuevamente la Administración regional “nos esté ninguneando las ayudas agroambientales, que llevan tres años sin ser convocadas ni prorrogadas, aun cuando existía un compromiso de prorrogarlas hasta la entrada en vigor de la nueva PAC”, redordaron.
Igualmente, indicaron que en el caso en el que cualquier profesional del campo tenga el “privilegio” de mantener una medida en vigor “estas se están pagando tarde y mal, ya que a más de uno de nosotros todavía se nos adeuda el 50% de la medida agroambiental de Agrosistemas Extensivos de secano de la campaña 2011”, concluyeron.