Veintiocho alcaldes de la comarca de Almazán han recibido información sobre el nuevo modelo de Ordenación, Gobierno y Servicios del Territorio que quiere poner en marcha la Junta de Castilla y León. Este es el cuarto encuentro del delegado Manuel López con alcaldes, en los que el delegado territorial se ha reunido ya con 74 municipios, de los 183 de toda la provincia.
El delegado territorial, Manuel López, tiene previstas otras seis reuniones hasta junio, en las que seguirá desgranando a los representantes municipales las directrices y los avances en el nuevo modelo de ordenación. López ha referido, dentro de estos avances, el hecho de que, tras la constitución y puesta en marcha de dos mesas de trabajo, el consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, ha anunciado que en el último trimestre de este año se remitirá a las Cortes el Proyecto de Ley de Gobernanza, Ordenación y Servicios en el Territorio.
Como ha explicado el delegado territorial en el Aula Cultural San Vicente de Almazán, el proyecto de ley recogerá lo fundamental de la ordenación del territorio: se definirán los Distritos Rurales (dimensiones, funciones, etc.) y Urbanos, las competencias que continuarán ejerciendo los municipios, dependiendo de su tamaño; se definirán las funciones de las diputaciones provinciales para suprimir duplicidades; y se fijará un periodo transitorio de seis meses para cerrar el mapa de distritos, que será de abajo a arriba, de las provincias a la Comunidad Autónoma, que posteriormente se someterá a información pública. Además, se definirán también los servicios que la Junta de Castilla y León prestará en el territorio.
También se determinará en el proyecto de ley la forma de declarar un territorio 'área estratégica' (podrán constituirse para resolver problemas específicos de una zona mediante la agrupación de distritos comunitarios rurales) y las 'áreas permanentes', así como la cartera de servicios que podrán desarrollar.
Las áreas funcionales permanentes vendrán constituidas por las ciudades y sus alfoces y consistirá en la agrupación de cada distrito de interés comunitario urbano –municipio de más de 20.000 habitantes- con los distritos de interés comunitario rurales de su alfoz.
Desde principios de mes funcionan dos grupos de trabajo para la ordenación del territorio: uno para definir las competencias de los municipios y distritos de interés comunitario y otro para los temas relacionados con las diputaciones provinciales. Sobre el mes de junio, estos grupos realizarán las propuestas para modernizar las diputaciones provinciales y para regular el tamaño, número de habitantes y funciones de los distritos de interés, así como de las áreas funcionales y de la cartera de servicios.
Todo ello, junto con las funciones de representatividad de los municipios en función de su tamaño, se recogerá en el proyecto de ley. Sobre la base del acuerdo que se alcance y de esta nueva ley se fomentará un nuevo Pacto Territorial, que sustituya al actual Pacto Local, y que refuerce el modelo de ordenación y gobernanza implantado. Dicho pacto se negociará con la Federación Regional de Municipios y Provincias. El proyecto de ley también definirá la financiación del pacto territorial y sus mecanismos de acceso.
El delegado territorial ha ofrecido la colaboración del Gobierno Regional para resolver todas las posibles dudas y ha comprometido un debate abierto en el que los interesados puedan realizar sus aportaciones, que serán recogidas y estudiadas por la Junta. Manuel López ha explicado también el nuevo papel que tendrán las diputaciones en el futuro modelo, que establecerá mecanismos de coordinación entre éstas y la Junta.
“El objetivo es fomentar un mayor equilibrio y cohesión territorial en la Comunidad, unirse para ser más fuertes, para ofrecer mejor calidad en los servicios evitando duplicidades, en definitiva, hacer la vida más fácil a los ciudadanos", ha recordado el delegado. A ello se ha dirigido la acción de la Junta en el despliegue sectorial de servicios e infraestructuras. Cualquier modelo de ordenación debe estar basado en el municipio como pieza clave, por lo que el plan propuesto plantea un ajuste en el funcionamiento de las Administraciones locales, pero sin necesidad de crear nuevas estructuras administrativas.
Este ajuste pasa por fortalecer las entidades locales, promoviendo una referencia territorial más sólida y fuerte para la acción de las administraciones públicas, que permita mayor coordinación y eficiencia entre ellas. El modelo insiste en el mantenimiento de los municipios, buscando una prestación de servicios públicos más eficiente y mejorando la coordinación de la planificación sectorial con los denominados distritos de interés comunitario, que serán las nuevas unidades básicas de la ordenación. Por su peculiaridad de población y competencias, constituirán distritos, sin necesidad de asociarse, los municipios de más de 20.000 habitantes.
En el caso de Soria, de los 183 ayuntamientos de la provincia, solo la capital tiene más de 20.000 habitantes. Hay dos con más de 5.000 (Almazán y El Burgo de Osma), cinco entre 2.000 y 5.000 vecinos (Ágreda, Golmayo, Ólvega, San Esteban de Gormaz y San Leonardo de Yagüe), entre 1.000 y 2.000 otros cinco ayuntamientos (Arcos de Jalón, Berlanga de Duero, Covaleda, Duruelo de la Sierra y Vinuesa), nueve entre 500 y 1.000 habitantes y 161 ayuntamientos con una población de menos de 500, de éstos últimos 106 cuentan con menos de 100 vecinos.
Con el nuevo modelo se reordenará además el mapa de las mancomunidades, que componen un sistema desequilibrado y redundante. En Castilla y León existen 239, y el 89,7% de los municipios participan en alguna de ellas. En Soria hay 13 mancomunidades, 6 entidades asociativas tradicionales y un consorcio. Los municipios mancomunados son 88, con una población de 68.674 habitantes (72,1% del total).