A pesar de la tristeza de numerosos cofrades, el acto religioso, dentro de la iglesia, se ha desarrollado con numerosos fieles que abarrotaban el templo, y toda la vistosidad y solemnidad posible. En el exterior, uno de los pasos permanecía protegido con plásticos, a la espera de ser trasladado a la concatedral, donde ya se encuentran todos los pasos e imágenes, listas para la procesión de la tarde, que partirá, si el tiempo lo permite a las 19.30 horas.
A pesar de la tristeza de numerosos cofrades, el acto religioso, dentro de la iglesia, se ha desarrollado con numerosos fieles que abarrotaban el templo, y toda la vistosidad y solemnidad posible. En el exterior, uno de los pasos permanecía protegido con plásticos, a la espera de ser trasladado a la concatedral, donde ya se encuentran todos los pasos e imágenes, listas para la procesión de la tarde, que partirá, si el tiempo lo permite a las 19.30 horas.