El Presidente de ASAJA Soria considera que las restricciones no se habrían impuesto si Valladolid, Palencia o Salamanca no hubieran terminado ya su cosecha. El proceso contencioso-administrativo anunciado tendrá como objetivo tratar de impedir que esta situación vuelve a suceder.
El proceso contencioso administrativo que ha iniciado ASAJA Soria contra la Junta de Castilla y León por la prohibición de cosechar a finales de julio debido al elevado riesgo de incendios sigue adelante. Carmelo Gómez, su presidente, considera que se trata de “un atentado contra el trabajo del agricultor”. Este año, asegura, han tenido que “aguantarse”, pero la medida va encaminada a que, de cara al futuro, este tipo de restricciones no puedan imponerse.
El presidente de ASAJA Soria ha ido un paso más allá, denunciando que se trata de una medida tomada cuando la mayoría de provincias de la región ya habían cosechado. “Si esto hubiera pasado sin segar en provincias como Valladolid, Palencia o Salamanca, la Junta no se hubiera atrevido a hacerlo”, declara. De hecho, Soria será la única zona de la región en tomar medidas.
La preocupación viene motivada por el gran número de inclemencias climáticas que pueden arruinar una cosecha una vez madurada, como pueden ser los incendios o la pedriza. “Si la hemos podido recoger en esos días, que este año no hemos podido cosechar, eso que nos llevamos. Si no lo recogemos y tenemos una desgracia nuestros ingresos se merman porque el precio de que tenemos acordado con los seguros está muy por debajo del de mercado y de garantizar nuestra subsistencia”, denuncia Gómez.
Reiteran que no están en contra de tomar las medidas necesarias para que no se produzcan incendios, pero que no pueden permitir que jueguen “con el pan de nuestros hijos”. Por ello, pretenden “que la Junta no pueda tomar este tipo de decisiones y anteponer la posibilidad de que haya un incendio a que un agricultor pueda recoger el fruto de su trabajo”.
Gómez asegura que van a luchar por sus socios y su producción cueste lo que cueste y, al mismo tiempo, batallan también por el resto de provincias de Castilla y León. “Esto a nuestra organización le va a costar dinero, las cosas no son gratis, nosotros no somos como los ecologistas que tienen la justicia gratis y pueden hacer de su capa un sayo”.