La subdelegada del Gobierno en Soria, María José Heredia, ha salido este lunes 10 de junio al paso de la polémica surgida en los últimos días sobre lo que muchos sorianos han considerado como una presencia abusiva de la Guardia Civil de Tráfico en cuanto a tests de alcoholemia en el entorno de Valonsadero en ambas jornadas festivas. En la Junta Local de Seguridad, en la que está también el Ayuntamiento, se aprobó de manera unánime la instalación de estos controles así como también la vigilancia del tránsito de vehículos por caminos del municipio.
Así, Heredia, insistió a SORIANOTICIAS.COM que en las órdenes de servicio la vigilancia de la Benemérita tanto en el Desencajonamiento y en el Lavalenguas se estableció en los mismos términos que en el año pasado y también explicó que dichos operativos no se instalan en los momentos de mayor afluencia de vehículos en caravana sino pasadas unas horas con el fin de evitar accidentes, ya que técnicamente, cuatro ó cinco horas después de concluirse cada festejo es cuando mayores posibilidades existen para que se produzcan siniestros. Por tal motivo, reseñó que en la Junta de Seguridad, donde se acuerdan las medidas a adoptar en estos días, entre las que figuran otros puntos como la existencia de lanchas en el Duero en Las Bailas o cómo dirigir el tráfico de ida o de vuelta a Valonsadero, entre otros, se fijaron las horas y los lugares de los controles en los mismos términos que en las pasadas fiestas.
En este sentido, y con la estadística en la mano, Heredia significó que en el pasado Lavalenguas la Guardia Civil imputó a tres personas por exceso de alcohol en las cerca de 200 pruebas realizadas, mientras que dos lo fueron en el Desencajonamiento, lo que quiere decir que del total de los inspeccionados, tres superaban los 0,6 gramos de alcohol por aire aspirado por litro de sangre. Sin embargo, no constan denuncias por conductores con menos de este porcentaje. Con ello, también comparó que en las campañas que periódicamente oficia la Dirección General de Tráfico se llevan a cabo unas 4.000 pruebas de este tipo a la semana, arrojando resultados del 1,3% de personas con tasas de alcoholemia superior a la permitida por el 2% de las que fueron registradas en estas dos jornadas.
Heredia, que se mostró dispuesta a un encuentro con los representantes de peñas y también con las cuadrillas, dijo no comprender la postura del alcalde, Carlos Martínez Mínguez sobre este asunto, ya que el procedimiento seguido hasta ahora es el acordado por la Junta Local de Seguridad, en la que también se mantuvo que el Seprona de la Guardia Civil se encargaría de vigilar el tráfico rodado de los caminos de Valonsadero, donde se han cursado siete denuncias, así como también las hogueras, donde por otro lado, la subdelegada reseñó la existencia de una denuncia por este motivo. Cabe señalar que el edil cuestionaba públicamente los operativos de estos días. El Seprona efectúa labores de policía conforme a lo que se le indica desde la Junta de Castilla y León y desde el Ayuntamiento, incidió aquí Heredia, ya que el alcalde así lo pidió.
De igual modo, y habida cuenta de que algunos sectores apuntaban al nuevo capitán de la Guardia Civil en Soria como uno de los responsables de estas medidas consideradas como abusivas por parte de muchos sectores de la sociedad soriana, la responsable del Gobierno de España reseñó taxativamente que dicho puesto recibe órdenes del comandante y éste a su vez cumple con las directrices dictadas desde la Subdelegación.
Por último, desde la Subdelegación detallaron que una prueba de alcoholemia se prolonga durante un espacio de media hora, con lo que sería imposible parar a una fila entera de vehículos para llevar a cabo estos controles. Con ello, afirmaron también que para los festejos de la Compra y de la Saca, al igual que en las otras dos jornadas anteriores, la Guardia Civil no instalará este tipo de medidas en los momentos de mayor afluencia de coches, tanto en las horas de salida como de entrada.
Los distintos operativos se sitúan en Toledillo, Tableros Losán, frente a Hierros Gil, en la rotonda del barrio de las Casas y también en la rotonda del Caballo Blanco y en las inmediaciones de la Fuente de la Teja.