El secretario general del PSOE de Soria, Carlos Martínez Mínguez, resumió la entrevista mantenida en la tarde de este martes como decepcionante, en un encuentro que mantuvieron agentes sociales de la provincia, entre los que se encontraban, además de la formación política referida, sindicatos como UGT y CCOO, la Cámara de Comercio y la Federación de Vecinos.
Mínguez aseguró tras el encuentro con el responsable de la Cámara Baja, que seguimos teniendo más de lo mismo, y confesó que había esperanzas en que se podría haber dado un giro en las intenciones presupuestarias del Gobierno para Soria, en una tercera oportunidad que le dábamos al Partido Popular de Soria. Según sus afirmaciones, Mínguez señaló que el documento de mínimos presentado por los agentes no se contemplará en los Presupuestos Generales del Estado para este 2013.
Por ello, apuntó a los aforados nacionales del PP soriano como los responsables, también, de que no se cumpliera ninguno de los puntos exigidos al Gobierno, tildando sus posturas de conformismo y autocomplacencia, por no reivindicar lo que la sociedad soriana demanda.
También señaló que Jesús Posada les transmitió que no me puedo comprometer a nada, he hecho lo que he podido y estamos en una situación de crisis. Unas palabras por las que giró el discurso del presidente del Parlamento, intentando justificar lo injustificable, según transmitió el que también es alcalde de Soria.
Así mismo, Mínguez señaló que el tramo Almazán-Sauquillo del Campo fue abordado en la reunión, y reseñó que de la misma se vio que hasta 2014 el tramo no estará operativo, en una anualidad que sería la última completa de la legislatura. Por ello, criticó que si nos empezamos a plantear como objetivo terminar un tramo ejecutado al 90% y como balance de una legislatura de gobierno, arreglados vamos.
En este mismo sentido, aludió al compromiso con el que puede quedar satisfecho el Partido Popular de Soria, que dista mucho de lo que exigen los sorianos cuando le otorgaron su confianza en las urnas, de una forma tan abrumadora.
En cuanto al cauce por el que discurrió la reunión, el líder provincial de los socialistas sorianos indicó que fue cordial, si bien matizó que se desarrolló sin un mal gesto y ni una buena acción, aunque insistió en que la decepción ha sido unánime desde el mismo momento en el que Posada tomó la palabra, concluyó.
Según Martínez Mínguez, Posada señaló que compartía las demandas planteadas por los sorianos asistentes al encuentro, al tiempo que reconocía que no podía hacer nada. Reconoció que las reivindicaciones, relativas a la finalización de las obras de la A-15, el impulso de la A-11, la ejecución de la depuradora o la peatonalización del centro de Soria eran legítimas, pero sin comprometerse a mediar para su consecución.