Según han explicado este miércoles 5 de junio, las campañas de los últimos años “han comenzado tarde, incumpliendo reiteradamente su compromiso de iniciar sus actuaciones a principio de año”, ya que se trata de, fechas que por razones zootécnicas y de manejo de ganado, “son las más propicias para las explotaciones extensivas en pastoreo”.
Así mismo, significaron también que “gracias a las condiciones climáticas excepcionales que nos hemos encontrando durante esta primavera, con elevadas precipitaciones y frío que han retrasado el movimiento de los ganados a las montañas, han hecho que esta campaña de saneamiento no se haya convertido en un desastre como ocurrió en la pasada”.
De igual modo, aseguraron no compartir “una campaña de saneamiento ganadero en la que lo único que se sanea son los animales domésticos, y no la fauna salvaje que convive con ellos en los pastos”, apuntando hacia estas especies como responsables de la mayoría de los contagios en la provincia provincia, “donde se confirma que con los datos oficiales de saneamiento de 2012 y primeros resultados de 2013, el incremento de los casos de tuberculosis bovina que con una prevalencia del 3,24% en segunda revisión, es la más alta en Castilla y León”, lo cual hace inviable “que podamos realizar una sola prueba anual de tuberculosis bovina en la Unidad Veterinaria de Soria, que es la más afectada por este problema y que supondría una reducción sustancial del número de animales a chequear”. Un hecho que indicaron está ocurriendo en lo tocante a la brucelosis ovina “donde solo es necesario chequear el 10% de la cabaña ganadera”, mientras que para esta enfermedad en ganado vacuno se requiere un solo muestreo de toda la cabaña al no haberse detectado positivos en las últimas campañas de saneamiento ganadero.