El concejal de Servicios Locales, Javier Antón, acompañado de la teniente alcalde, Rosa Romero, y del arquitecto municipal José María Pérez Miranda, ha supervisado este martes 25 de junio la colocación de los 12.000 metros de vallado de La Saca y los últimos trabajos previos a la traída de los toros el Jueves la Saca. En esta ocasión, las principales novedades se concentran en la zona del carril bici desde el merendero de autoridades con algo más de 200 nuevos metros de valla rústica en sustitución de la malla ganadera y también en el trazado paralelo a la N-234 con otros 300 metros.
El concejal explicó que con esta nueva actuación, de 40.000 euros, “hemos repuesto ya más de 5.000 metros y apenas nos restan otros 600 con una inversión desde el año 2007 de más de 300.000 euros para acabar con toda la conexión de la N-234. Esto no significa que se termine ya que este tipo de infraestructura exige un cuidado constante y una inversión continua para seguir ganando en seguridad e ir reponiendo aquellos tramos que se queden más obsoletos”.
Igualmente, insistió en la aportación fundamental de los sanjuaneros para que La Saca discurra de la forma más idónea posible. “Todo lo que hacemos busca mejorar el tránsito de los novillos, pero obviamente no está garantizada la seguridad absoluta y, por eso, queremos insistir en que es importante que la gente no cite a los novillos desde el vallado, que colaboren y disfruten", pero explicó que el vallado no evita cualquier contratiempo contando con la fuerza de un novillo bravo". Por ello recomendó "prudencia" para que "la fiesta discurra de la mejor manera posible”.
Entre las novedades, Antón destacó la mejora de la zona aledaña a la Ciudad Deportiva en la que ahora con la obra de los accesos ya se puede colocar la valla con antelación cuando antes había que esperar hasta el mismo día del festejo. También se ha colocado malla naranja en la zona próxima al hotel con el objetivo de que los caballistas puedan orientase mejor a la hora de conducir los novillos tras la salida de Cañada Honda.
Javier Antón también quiso poner en valor la labor que desempeñan todos los empleados municipales directos e indirectos con picos de hasta 300 personas, en días como La Saca, para que la ciudad despierte cada día en las mejores condiciones. “Para disfrutar de las fiestas, no nos podemos olvidar con más de 300 personas estarán pendientes de que La Dehesa esté limpias, las calles estén en perfecto estado, el tráfico controlado, los bomberos, el almacén… Es importante agradecérselo públicamente y pedir a la gente que disfrute, pero que también cuide espacios como Valonsadero para seguir disfrutando de entornos privilegiados como este muchos años más”.