El Ayuntamiento de Soria ha dado luz verde este jueves 14 de mayo al convenio del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) de la provincia de Soria, una vez que ha sido aprobado con el voto favorable de todos los miembros de la corporación. La Diputación dio luz a este acuerdo por el que abonará cerca de 600.000 euros.
Un convenio que tendrá vigencia hasta el mes de marzo de 2016 y por el que será el Ayuntamiento de Soria quien se haga cargo de los gastos de este servicio y de la contratación de seis bomberos más, para dar cobertura a todas las zonas que finalmente se concretaron en tres, Moncayo, Ribera y Almazán, además de entrar también el área pinariega con epicentro en Vinuesa.
En el debate del punto, el concejal del PP en la oposición, Alberto Rodríguez indicó que una vez se desarrollen las competencias de los ayuntamientos y de las diputaciones en esta materia, este convenio, que es una encomienda de gestión de servicios públicos, sirva para para implantar un consorcio en el que esté toda la provincia implicada. Ingualmente, pidió que el dinero que aporta la institución provincial revierta en el propio parque de bomberos soriano sirviendo también para modernizar su equipamiento y se aplique además en la formación de los efectivos. A todo ello sumó la necesidad de hilar fino en las cláusulas contractuales del servicio, para salvaguardar las responsabilidades derivadas en el caso de una actuación anómala.
Por su parte, el portavoz del equipo de Gobierno municipal, Luis Rey, coincidió con Rodríguez, si bien apuntó hacia la Junta para que participase en dicho servicio "como responsable de Protección Civil y que lamentablemente, ni está ni se le espera". Aludió seguidamente a que el parque del SEIS capitalino suma un gasto a las arcas del municipio de 2,3 millones de euros. En este punto, recordó que desde la Diputación, cuando el Ayuntamiento rechazó la propuesta de 350.000 euros que se ofrecía desde la institución provincial nos tacharon de responsables.
Aquí, Rodríguez indicó que con esta cantidad el servicio daba una cobertura a un radio de 30 kilómetros y ahora, con los cerca de 600.000 euros anuales, queda protegida toda la provincia.