El equipo celeste estrena camiseta para los líberos y busca en Los Pajaritos recomponerse tras la derrota en la primera jornada de la liga regular. No lo tendrá fácil, pues enfrente está el casi todopoderoso Ushuaïa Ibiza.
Los de Manolo Sevillano, quienes estrenaban esta tarde-noche el nuevo curso 2018-19 en Soria, no han podido con la potencia de un equipo visitante que nunca pone las cosas fáciles, Ushuaïa Ibiza.
Los celestes jugaban en casa y, por lo tanto, contaban con el favor del público, quizás este factor ha sido decisivo para que los sorianos hayan tuteado al equipo ibicenco.
Las dos primeras mangas caían del lado visitante pero la diferencia era mínina, en ambas el tanto se cerraba 23-25. En ningún momento se producían diferencias abultadas en el marcador casi se podría decir que la suerte ha inclinado la balanza para el equipo amarillo.
El tercer set se lo apuntaba el Río Duero (25-20) con un juego decidido y sin mostrar ningún complejo ante el rival. Pero con la cuarta manga llegaba el momento del bajón físico y la desconcentración y Ushuaïa Ibiza conseguía desmarcarse en el luminoso y sellar el encuentro con un 17-24 que dejaba un sabor de boca amargo y la segunda derrota liguera.