El leonés Saturnino de la Fuente, que a finales de 2021 fue reconocido como el hombre más longevo del planeta, estaba a punto de cumplir 113 años. Zapatero de profesión, futbolero y familiar, su escaso metro y medio de estatura le libró de ir a la guerra.
Castilla y León llora en la jornada de hoy la perdida del hombre de más edad que había en la tierra. Se trata de Saturnino de la Fuente, un leonés que estaba a punto de cumplir (el 8 de febero) los 113 años de edad y cuyo hito quedó auditado el año pasado por el libro Guinness de los Records.
Pepino para los amigos, Saturnino nació en Puente Castro, un barrio a las afueras de León junto al río Torío. Nacido en 1909 fue zapatero, primero en una fábrica y luego por cuenta propia. Casado con Antonina Barrio tuvo siete hijas y un hijo que le dieron 14 nietos y 22 bisnietos. Una de ellas, Ángeles, y su yerno, Bernardo, han sido los encargados de cuidarle durante los últimos 25 años.
Según cuentan quienes le conocían en León, esos cuidados y “una vida tranquila” eran los factores a los que achacaba una longevidad inusual. Aficionado al fútbol, fundó el equipo de su barrio y también era buen seguidor de la Cultural y Deportiva Leonesa.
Hoy Castilla y León despide al que fuera hasta hace unas horas el hombre más longevo del mundo. Nacido oficialmente el 11 de febrero de 1909, siempre celebraba su cumpleaños el día 8 puesto que afirmaba que ese fue el día en que realmente vino al mundo. Su escaso metro y medio de estatura le salvo de ir a la Guerra Civil. La capilla ardiente con sus restos quedará instalada este martes en el tanatorio de Serfunle de la capital leonesa.