Un total de 379 centros docentes públicos de Castilla y León, la mayoría de la zona rural, desarrolla planes de formación propios este curso académico. La Consejería de Educación ha programado 1.064 actividades formativas, en las que participan 13.576 profesores. La media de Castilla y León está en un 36%, y Soria está en un 52%, la segunda provincia de la Comunidad después de Segovia, con un 65%.
Esta modalidad consiste en que los docentes de un centro educativo reciben formación especializada y contextualizada que previamente han solicitado. Las tendencias de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y de la Unión Europea, en materia educativa, reconocen a colegios e institutos como núcleos básicos de la formación permanente del profesorado, capaces de dar respuesta a las necesidades surgidas del análisis de la práctica docente, tanto en lo referente a la actuación en el aula, como en lo relativo a la gestión y la coordinación pedagógica. Esta situación determina una nueva forma de trabajo en equipo del profesorado, comprometido en una tarea común y persiguiendo una mayor cohesión y coherencia del conjunto.
De este modo, la Consejería de Educación, bajo la coordinación de la Dirección General de Innovación Educativa y Formación del Profesorado, ha diseñado un nuevo cauce de participación, en el que los centros educativos elaboran su propio itinerario formativo: los planes de formación en centros.
El modelo de Castilla y León considera los colegios e institutos como escenarios habituales de la formación, lo que posibilita que esta se adapte mejor a las necesidades del entorno y favorezca una mayor implicación y participación del profesorado, el fortalecimiento del trabajo en equipo y una mayor integración en sus proyectos educativos y curriculares.
Para el curso 2013-2014, 379 centros educativos tienen implantado su propio Plan de Formación, lo que supone, aproximadamente, un 36 % de los centros públicos de Castilla y León. En conjunto se han programado 1.064 actividades formativas, en las que participan 13.576 profesores. Por ámbitos de formación, la zona rural supone el 65 % del total de planes de centro, (de los 248 centros con planes, 180 planes se desarrollan en Centros de Educación Infantil y Primaria (CEIP) y 68 en centros de Secundaria), frente al 35 % en el ámbito urbano (de los 131 centros con planes, 57 se llevan a cabo en CEIP y 74 en centros de Secundaria).
Por niveles, los Centros de Educación Infantil y Primaria desarrollarán 237 planes (el 63 % del total), frente a los 142, que suponen un 37 %, desarrollado por los Institutos de Enseñanza Secundaria.
Por otra parte, las principales temáticas de los itinerarios formativos de los planes de formación de los centros están relacionadas con el desarrollo de las competencias profesionales. De esta forma, la competencia digital, aplicación didáctica de las TIC, está presente en el 39 % de los itinerarios; la actualización de la competencia científica del currículo, en el 20 %; la competencia didáctica, es decir, formación para el éxito educativo (áreas instrumentales y competencias básicas) en el 16 %; la competencia comunicativa y lingüística (programa de bilingüismo), en el 14 %, y la competencia en gestión de la convivencia (promoción de la convivencia), en el 11 %.
Los planes de formación en centro tienen una duración mínima de dos cursos escolares y máxima de cuatro y están integrados por uno o varios itinerarios formativos, o lo que es lo mismo la articulación en el tiempo de las diferentes acciones formativas de cualquier modalidad que permitan el desarrollo de todas las competencias propias inherentes a los profesionales de la educación conducentes al perfeccionamiento profesional a la vez que potencian programas del propio centro educativo como los relacionados con el éxito educativo, la lectura, la comunicación lingüística o la convivencia. Estas iniciativas suponen una mejora de las competencias profesionales, de la organización y funcionamiento del centro y de los procesos de enseñanza/aprendizaje de los alumnos.
Esta modalidad formativa comenzó en Castilla y León en el curso 2008-2009 como consecuencia de la puesta en marcha de un nuevo modelo de formación del profesorado, similar al establecido en países europeos. Este nuevo modelo incluyó entre las acciones formativas del profesorado no universitario, estos planes de formación en centros escolares, una amplia oferta de cursos online, además de las tradicionales acciones presenciales que conforman la propuesta de formación permanente del profesorado, impartidas en los CFIE (Centros de Formación del Profesorado e Innovación Educativa).
Desde su implantación, y hasta el curso pasado, 604 centros educativos de Castilla y León, 51 % del total de centros públicos, han desarrollado un total de 1.530 planes con 4.075 actividades formativas y en las que han participado 49.269 profesores.