La Junta apoya el desarrollo de varios programas sanitarios preventivos de la Consejería de Sanidad.
El presupuesto que recibirán los investigadores de la Universidad de Valladolid (UVA), por parte del Gobierno regional, se empleará en dos tipos de estudios. Por un lado, investigaciones relacionadas con programas de salud pública -con una partida económica designada de 480.000 euros- y, por otro, investigaciones derivadas de la farmacovigilancia -subvencionadas con 50.000 euros-.
Dentro del ámbito de la salud pública, la Junta y la UVA, seguirán trabajando de manera conjunta en tres líneas básicas. La primera de ellas es el Programa del consejo genético en cáncer hereditario de mama, ovario y colorrectal. La UVA, con la ayuda de la Fundación de Investigación del Cáncer de la Universidad de Salamanca, realiza estudios genéticos sobre las muestras que le son remitidas desde las Unidades de Consejo Genético del Complejo Asistencial de Burgos y del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid.
El fin de esta acción es que las personas con predisposición a padecer estas enfermedades están vigiladas y, en caso de que sus resultados sean positivos, se procede a ofrecer a estos ciudadanos un asesoramiento y una asistencia sanitaria inmediata. En 2013 se llevaron a cabo 857 de estos estudios, de los que se beneficiaron 411 personas en toda la Comunidad.
Asimismo, la subvención hoy aprobada se invertirá también en el Programa de detección precoz de enfermedades congénitas. Éste permite la realización de estudios genéticos sobre las muestras de todos los niños recién nacidos de Castilla y León que los hospitales hacen llegar al personal de la UVA. El fin es la detección precoz de determinados problemas de salud como el hipotiroidismo, la fenilcetonuria, la fibrosis quística e la hiperplasia suprarrenal, en los que el diagnóstico rápido es vital. Al igual que en el caso anterior, si las muestras analizadas por la universidad resultan positivas, ésta las remite a los responsables sanitarios para que se ponga en marcha el tratamiento más adecuado de forma inmediata. El año pasado se realizaron 17.521 de estos estudios.
El último programa de salud pública incluido en esta partida económica es el de medición de parámetros físico-químicos ambientales. La Universidad de Valladolid evalúa, procesa y actualiza la información sobre los valores ambientales, electromagnéticos e industriales presentes en las mayores poblaciones de la región. Lo que ofrece información sanitaria de gran valor al Sistema Regional de Salud.
El año pasado se efectuaron 1.148 mediciones de niveles de exposición a campos electromagnéticos, radiofrecuencias y microondas en todos los complejos asistenciales castellanos y leoneses y se analizaron, en profundidad, los datos de 828 mediciones realizadas en la provincia de Valladolid. Asimismo, en 2013 se realizó un estudio sobre la exposición, durante 24 horas, a la radiación electromagnética de frecuencia industrial; en este proyecto participaron 170 voluntarios.
Finalmente, dentro del campo de la farmacovigilancia, la UVA identifica, cuantifica y analiza los riesgos potenciales que los pacientes tienen de padecer reacciones adversas a los medicamentos que se comercializan en la región incrementando, de este modo, la seguridad de los mismos. Esta actividad se realiza a través el Instituto de Farmacoepidemiología de la institución docente; único centro acreditado como Centro Regional de Farmacovigilancia en Castilla y León. Dentro de esta investigación, en 2013 se evaluaron 1.103 informes de reacciones adversas -675 de los cuales resultaron positivos- y se atendieron 132 consultas de los profesionales sanitarios.