Según el informe, se dieron las condiciones para que se formara una estructura convectiva intensa y organizada que permaneció casi estacionaria durante una hora.
De un informe elaborado por la Agencia Estatal de Meteorología se desprende que el día 2 de julio de 2014 en la localidad de Almazán entre las 15:00 y 16:30 horas se reunieron los ingredientes necesarios para que se formara una tormenta de granizo histórica. Los cálculos que realizan los técnicos de la Delegación Territorial de la AEMET en Castilla y León indican que parece posible que la cantidad caída en una hora se encuentre próxima a los 100 litros por metro cuadrado y con una intensidad máxima de 200 litros por metro cuadrado entre las 15:40 y las 15:50 horas, lo que supone que en diez minutos podrían haberse recogido 33,3 litros por metro cuadrado.
Según el informe, se dieron las condiciones para que se formara una estructura convectiva intensa y organizada que permaneció casi estacionaria durante una hora. Las reflectividades tan altas observadas por el radar de Zaragoza eran una señal no sólo de la intensidad de la precipitación sino también de la presencia de gran cantidad de partículas de hielo (granizo).
El radar no es un instrumento de medida de la precipitación pero permite hacer una estimación tanto más exacta cuánto más cerca se encuentra el lugar de observación del radar. En este caso la lejanía de la zona de estudio impide realizar una estimación exacta. De acuerdo con las estimaciones de la intensidad de precipitación, el aumento de la reflectividad debido a la presencia de granizo, la altura que en este punto observa el radar y los datos históricos climatológicos parece posible que la cantidad caída se aproxime a la referida de 100 litros por metro cuadrado en una hora.
En las imágenes radar del 2 de julio se observaron a partir de las 11:30 chubascos aislados, débiles en general, en el sur de la provincia de Soria. A las 13:00 aparece una célula convectiva que indica que las corrientes ascendentes ya eran fuertes. A las 14:00, ya había varias células con reflectividades máximas. El diagnóstico y seguimiento realizado reflejaba que en las tormentas del sur de Soria era probable la presencia de granizo. Es probable que esta convección previa al suceso de Almazán generase una gran cantidad de cristales de hielo que fueron recogidos por las siguientes células. El resultado final sería la presencia de muchas partículas generadoras de granizo en un ambiente húmedo con corrientes ascendentes fuertes. Las partículas embrionarias no podían crecer mucho en tamaño precisamente debido a la competencia con las otras partículas.
Otra característica de la célula que afectó a Almazán es que presentaba un movimiento hacia el nordeste mientras que el resto se movía hacia el noroeste. Esta característica está resaltando que dicha célula tenía una estructura interna organizada de forma que su propagación estaba dominando al movimiento de traslación impuesto por el entorno. Y además el movimiento resultante era muy lento de forma que las precipitaciones intensas estuvieron cayendo prácticamente en el mismo punto durante 50 minutos.
Ese día, en la provincia de Soria se registraron 412 descargas y entre las 14:00 y las 18:00 horas hubo 267 descargas. En este mismo período en un círculo de 20 Km centrado en Almazán se registraron 206 descargas (el 50 % de todo el día en la provincia de Soria) lo que indica el grado de actividad de la convección que se formó en ese período de tiempo y sobre la zona de estudio.
La teoría dice que cuando las corrientes ascendentes son más fuertes se producen desplazamientos de las cargas negativas hacia niveles superiores aumentando el número de descargas positivas. Entre las 14:00 y las 18:00, cerca de Almazán se observaron 12 descargas positivas y 7 se registraron entre las 15:05 y las 16:23 horas.