SATSE logra un fallo judicial en primera instancia por el que una enfermera en Segovia realiza 237 jornadas de trabajo efectivo al año frente al máximo legal de 222.
El servicio jurídico del Sindicato de Enfermería, SATSE, en Segovia ha ganado una sentencia en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo 1 de esta provincia por la que se reconoce que una enfermera del Hospital General segoviano realizaba más días de trabajo de los que fija como máximo anual la normativa autonómica para los empleados públicos.
El fundamento del texto judicial es algo que SATSE ha venido defendiendo en multitud de ocasiones en las mesas de negociación y que es que los trabajadores de Sacyl estaban siendo "discriminados" respecto al resto de empleados públicos de la Administración autonómica, ya que estos últimos "trabajan 222 días como máximo a lo largo del año, mientras que algunas enfermeras de Sacyl con las mismas consideraciones legales lo hacen 237 días".
"Esto conlleva que esas enfermeras" han señalado en el sindicato, "estén más días en su puesto de trabajo para realizar la misma jornada laboral que el resto de empleados públicos". Así han calculado que son 1.665 las horas anuales que se impusieron en la Ley de medidas autonómicas en 2012 en una medida "que supuso recortes laborales para todos los empleados públicos de la Comunidad", entre ellas, el aumento de la jornada laboral de 35 a 37,5 horas semanales.
La enfermera demandante consideraba que había tenido un exceso de jornada anual, no en cuanto al número de horas de trabajo, sino en cuanto al número de días de trabajo, y la sentencia señala que el número de jornadas de los trabajadores tiene que ser igual para todos los empleados públicos, cualesquiera que sea la actividad que desarrollan y la forma de prestarse el servicio, incluso el personal sanitario, puesto, que como señala ese fallo judicial, la Ley de 2012 establece que todos los empleados públicos deben realizar una jornada máxima en horas (1.665) que se deben concentrar en 222 días.
"Sacyl vulnera año tras año la normativa genérica y elabora los calendarios laborales partiendo de un número mayor de días que se debe acudir al puesto de trabajo, según dicha normativa", han denunciado en el sindicato, añadiendo que esto produce no sólo una "clara discriminación" de sus trabajadores respecto al resto de empleados públicos de Castilla y León, sino "un mayor impedimento para que esos trabajadores sanitarios puedan conciliar su vida laboral y personal".
Asimismo, esta vulneración de la normativa también "supone un mayor desgaste físico que en muchos casos contribuye al aumento del estrés en el trabajo y de la aparición del Síndrome de Burnout, lo que deriva claramente en un aumento de bajas laborales", han concluido.