Soria y Golmayo estudian la propuesta del Gobierno de pasar la ejecución al horizonte de los fondos europeos 2014-2020 sin renunciar al porcentaje de financiación del 80%, y proponen ejecutar obras hidráulicas con cargo a los actuales fondos. El Estado se haría cargo del 30% de la obra.
Habida cuenta de la imposibilidad de firmar la adenda al convenio de la depuradora por los informes negativos de los servicios económicos y jurídicos del Ayuntamiento de Soria, y dado que se trata de un documento cerrado no abierto a la negociación, según ha trasladado la empresa pública ACUAES, el alcalde capitalino ha aceptado estudiar la propuesta del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, de pasar al horizonte 2014-2020 la ejecución de la nueva depuradora (EDAR) para Soria, Los Rábanos y Golmayo.
Carlos Martínez Mínguez, no obstante ha incidido en que la aceptación de la propuesta no implicaría nunca "la aceptación resignada" de las condiciones de fondos europeos al 50% con cargo a los mismos y el resto a los usuarios finales, sino que se exigirá la compensación al Gobierno de España del 30% restante para igualar las condiciones de financiación que se consiguieron en 2011, es decir, que los usuarios finales tengan que abonar el 20% del coste total del proyecto.
El regidor ha insistido en que únicamente es la voluntad política la que hace falta para que el Gobierno de España compense en ese porcentaje los fondos europeos que se lograron con la Declaración de Interés General del proyecto de la EDAR de Soria y la posterior encomienda a la entonces ACUANORTE, ya que a su juicio, "es un tratamiento justo" para la ciudad, según fuentes municipales.
Mínguez ha puesto sobre la mesa que no renunciará "de ninguna de las maneras" a la construcción de la nueva depuradora, y ha incidido la posibilidad de ejecutar algunas obras hidráulicas en la capital con cargo a los actuales fondos en dos líneas, que pasan por la adecuación a la normativa europea de la actual depuradora, eliminando los problemas de olores a los vecinos de la zona, y de otro lado, obras de sustitución y nuevos colectores.
De este modo, y siempre en función de lo reseñado por el Consistorio, se mantendrá la vida útil de la EDAR mientras se construye la nueva en el paraje Sinova, en condiciones acordes a la legalidad y sin causar molestias a los ciudadanos. También se llevarán a cabo actuaciones en los colectores de la ciudad que se beneficien de esta financiación al 80% aprovechando las condiciones que contemplan los fondos europeos.
Para desarrollar esta propuesta está prevista una reunión a finales de semana entre los técnicos de las administraciones implicadas para marcar los proyectos asignables a los actuales fondos y susceptibles, por tanto, de ser financiados.
Mínguez ha explicado que con esta medida se trata de poner soluciones al "callejón sin salida al que se había abocado el proyecto de la depuradora de Soria, sobre la que corría un riesgo más que seguro de que finalmente fueran los vecinos de Soria los que tuvieran que sufragar el coste total de una obra de más de 80 millones, con costes financieros que ni licita, ni adjudica, ni ejecuta el Ayuntamiento y para la que ni siquiera el Ministerio de Medio Ambiente se ha hecho con la titularidad de los terrenos".
De igual modo ha recordado los escenarios a los que estaba abocado el Ayuntamiento de Soria en una "suicida firma de la adenda al convenio de la EDAR, a pesar de su imposibilidad jurídica".
Así y por un lado, en una primera opción, se ejecutaría la EDAR con un importe de 19,3 millones de euros y un plazo de 20 meses, a pesar de la justificación de fondos a 31 de diciembre de 2015 para el porcentaje 80% (UE) y 20% (usuarios finales). Señalar aquí que no se han expropiado los terrenos antes de plazo, esto es, en 10 meses. En este procedimiento, la UE aportaría 15,5 millones de euros y los 3,8 restantes los ayuntamientos, siempre y cuando, además los túneles emisarios, -36 millones de euros y financiados al siguiente periodo de fondos- se ejecutasen antes de marzo de 2017, permitiendo la puesta en marcha de la EDAR. De lo contrario, los municipios abonarían el 100% del coste de la depuradora, esto es, 19,3 millones de euros.
En el segundo de los escenarios, se podrían iniciar las obras a comienzos de 2015, con lo que apenas la mitad del proyecto de ejecución, unos 10 millones de euros, podría acogerse a los mismos. Por ello, 7,7 millones de euros se facturarían con cargo a la UE, y los 11,5 restantes a los Ayuntamientos de Soria, Golmayo y Los Rábanos. Una opción que, de nuevo, debería ver materializada la obra de los colectores y con la planta en funcionamiento en marzo de 2017. De lo contrario la totalidad de la obra sería para los ayuntamientos mencionados.
En el tercero de los planteamientos, presentados por el MAGRAMA, el total del proyecto pasa al siguiente periodo de fondos europeos en condiciones de financiación al 50% tanto para la UE como para los municipios, con lo que de los 19,3 millones de euros, los ayuntamientos pagarían 9,6 millones de euros, sin riesgo de asumir el total de la obra, ya que la EDAR no tendría que estar en funcionamiento con los colectores finalizados en marzo de 2017.
El estudio de esta nueva vía ha sido aceptado por los representantes municipales, sin renunciar a la financiación del 80% en lugar del 50% contemplado previsiblemente por las directrices europeas, aún sin aprobar. Esta opción, incluye en resumen que el 30% correspondiente a las administraciones locales sea compensada por el Gobierno de España con los propios fondos del Ministerio.