El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León da luz verde a estos yacimientos que comprenden un complejo de ocupaciones sucesivas de muy distinta entidad, muy representativas de los constatados en la Comunidad.
El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado este jueves la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de Zona arqueológica la Villa romana y necrópolis celtibérica de San Martín, en la localidad soriana de Ucero. Asimismo, se delimita como zona afectada por la declaración un área limitada para proteger los valores que concurren en la zona.
La Villa romana y necrópolis celtibérica de San Martín, en la localidad soriana de Ucero, ha sido declarada Bien de Interés Cultural con categoría de Zona arqueológica y se delimita como zona afectada por la declaración el ámbito espacial necesario para su protección, definiéndose un área limitada y concreta en la que cualquier intervención que se realice puede suponer una alteración de los valores que concurren en la zona y determinan su declaración como Bien de Interés Cultural.
La necrópolis prerromana y villa romana se localizan en la zona de contacto entre la llanura aluvial del curso alto del Duero y las primeras estribaciones de los Montes Ibéricos, dentro del término municipal de Ucero. El yacimiento consta de sucesivas áreas funcionales que abarcan una dilatada cronología, ya que presenta restos esporádicos desde el Paleolítico Medio, y se reconocen vestigios estructurales, tanto residenciales como funerarios, de época romana y medieval. El núcleo principal, mejor conocido gracias a las excavaciones arqueológicas efectuadas desde los años 80, se localiza en el sector sureste del pueblo en la margen izquierda del río Ucero. Las investigaciones arqueológicas han permitido identificar dos habitaciones correspondientes a la parte urbana de un complejo vilicario tardorromano, que se extiende a ambos lados de la carretera SO-920, ocupando los parajes de San Martín y Pozo de Jaray.
En definitiva, la zona arqueológica comprende un complejo de ocupaciones sucesivas de muy distinta entidad, muy representativas del tipo de yacimientos constatados en la Comunidad. La necrópolis celtibérica ha proporcionado unos ajuares de gran calidad e importancia, recuperados a través de trabajos científicos.
Por su parte, la villa romana se ha reconocido muy parcialmente, si bien la constatación de espléndidos pavimentos musivarios polícromos de tema mitológico indica la relevancia de la quinta aristocrática aquí ubicada en época tardorromana. Estas características muestran el alto valor cultural del patrimonio que alberga este lugar y justifican su declaración como Bien de Interés Cultural.