La intervención, que supone una inversión de 170.000 euros, se desarrolla en las zonas altas del transepto sur del tempo y comprende la restauración de las vidrieras, entre otros puntos.
La consejera de Cultura y Turismo, Alicia García, ha visitado este martes las obras de restauración que se realizan en la catedral de Ávila y que suponen otro hito más en la celebración del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús. Esta actuación se une a las ya realizadas o que se están desarrollando en otros bienes del patrimonio teresiano como el convento de Santa Teresa y la ermita del Humilladero en Ávila; la iglesia de San Juan, el convento Carmelita y las restauraciones del estandarte de canonización de la santa y del Fuero de Alba de Tormes en la localidad salmantina, y la iglesia del convento de las Carmelitas Descalzas en Medina del Campo, en Valladolid. Estas actuaciones de restauración, que se están llevando a cabo gracias a este centenario, contribuyen a valorizar el patrimonio cultural de la Comunidad y suponen una inversión por parte de la Junta de Castilla y León superior al millón de euros.
Las actuaciones, que se desarrollan en las zonas altas del transepto sur de la Catedral de Ávila, abarcan la restauración de las vidrieras, de los elementos de piedra de las ventanas góticas en los que se alojan y la modificación de las cubiertas para evitar el encuentro directo del tejado con la vidriera, recuperando así su original disposición y aumentando la luminosidad. Esta actuación supone una inversión de 170.000 euros y está previsto que finalice en febrero de 2015. En la Catedral de Ávila, en otras vidrieras y paramentos, anteriormente se llevaron a cabo intervenciones por parte de la dirección general de Bellas Artes a través del Instituto de Patrimonio Histórico, dependiente del Ministerio de Cultura.
La Junta de Castilla y León ha diseñado un Plan de promoción del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa, que llegará a 14 países de tres continentes, y permitirá la internacionalización del producto turístico cultural y religioso asociado a esta celebración, actuando en 14 países. Este Plan cuenta con una inversión de casi tres millones de euros, de los seis que la Consejería de Cultura y Turismo destinará al proyecto global del V Centenario. Una pieza clave de esta conmemoración será la próxima edición de la exposición Las Edades del Hombre, que llevará por título 'Teresa de Jesús. Maestra de Oración', y que se desarrollará Ávila y Alba de Tormes, y cuyas sedes serán la Capilla de Mosén Rubí y las iglesias de Nuestra Señora de Gracia y de San Juan Bautista en la capital abulense y la Basílica de Santa Teresa en la localidad salmantina de Alba de Tormes, donde se llevará a cabo, además, una exposición de Venancio Blanco que acogerá de iglesia de San Juan.
Todas las actuaciones que se están desarrollando están enfocadas a poner a Castilla y León en un lugar preeminente dentro de los actos que se van a desarrollar para conmemorar el V Centenario, una magnífica ocasión para divulgar el destacado papel de Santa Teresa en diferentes ámbitos, desde el religioso al literario, el histórico o el cultural, su papel como mujer, como reformadora social, como mística o como emprendedora y aglutinadora de voluntades. Esta efeméride presenta una programación pensada para llevar a cabo una conmemoración de alcance universal y con una visión polisémica de Santa Teresa de Jesús con el fin de presentar una imagen contemporánea de ella, de enorme interés para todos los públicos.
Las vidrieras en las que se realizan las intervenciones son de gran calidad artística y constituyen el conjunto de las dos grandes ventanas góticas con tracería, uno de los más interesantes de la Catedral, obra del maestro burgalés Juan de Valdivieso realizadas probablemente entre los años 1497 y 1500.
Estas vidrieras presentaban deformaciones y movimientos, desprendimientos y desplomes del panel inferior de la lanceta izquierda de la vidriera S-X, consecuencia de los daños sufridos por las vidrieras S-X y S-XI, situadas en el extremo sur del transepto de la Catedral a causa del fuerte viento que presionó sobre sus debilitados paneles a principios del año 2006.
Las actuaciones comprenden la restauración de las vidrieras, la restauración de los elementos de piedra de las ventanas góticas en que se alojan las vidrieras y la modificación de las cubiertas para evitar el encuentro directo del tejado con la vidriera y recuperar parte de la superficie del vano. Se incluye la modificación del encuentro de la cubierta de madera con las vidrieras para mejorar la recogida de aguas y liberar las vidrieras de su conexión directa con un tejado, lo que permitirá además recuperar las dimensiones primeras de las vidrieras, algo más largas que las actuales. También se van a resolver los problemas que afectan a la estructura de madera de forma importante, como la podredumbre de la cabeza oeste de la jácena más baja.
Además, se consolidará la tracería de piedra de las ventanas góticas que alojan las vidrieras, rejuntándolas y evitando el paso de agua entre sus piedras y se restaurarán las pequeñas vidrieras de la parte superior de las ventanas. Por último, se moverán ligeramente las lancetas hacia el interior del templo, como se ha hecho con todas las demás del presbiterio y transepto cuando han sido restauradas, colocando un segundo vidrio de protección, que será el verdadero cierre del vano. Esta disposición ha demostrado ya su eficacia en los años transcurridos desde las primeras actuaciones y es por otra parte muy discreta, no apreciándose el dispositivo y mejorando muy sustancialmente la esperanza de vida de las vidrieras.