El sindicato exige que la provincia cuente con los técnicos que recoge la RPT, puesto que ahora sólo hay uno. En toda la Comunidad hay 20 plazas sin cubrir de un total de 55 puestos.
El sindicato CSI-F ha explicado que que en Soria, en este momento, hay un único inspector de consumo para una ratio de unos 93.200 habitantes, cuando las plazas de la RPT son tres. En estas condiciones, han asegurado que "resulta imposible atender las garantías que tienen los consumidores". Se dan las mismas situaciones de saturación que se producen en el resto de provincias de la Comunidad, por la falta de personal, que generan retraso en la tramitación de las denuncias y las resoluciones, y se reducen tareas de inspección y de alerta.
Asimismo, el responsable de consumo de Soria tiene que hacerse cargo también de la sección de comercio, lo que da idea de la provisionalidad con la que se atiende un aspecto tan importante como es el consumo, en opinión de la agrupación sindical independiente. Un servicio que durante algún tiempo ha estado "sin nadie" en Soria, teniéndose que contratar por urgencia a un empleado interino, por jubilación del inspector que había.
De las tres plazas que contempla la RPT para inspectores, durante largos periodos han estado ocupadas dos. Ahora hay ocupada una y por necesidad extrema. De dos personas que contaba como personal administrativo, ahora hay una persona compartida con la sección de comercio. Es decir, en la provincia de Soria, la Junta no tiene ninguna persona dedicada en exclusiva a Consumo, según han reclamado.