¡Adiós Ramón, hasta San Juan!

Ramón, un hombre querido y apreciado por todos; desde los mayores hasta los pequeños, porque tanto unos como otros hemos pasado por su "carrillo de los helados" o por la "máquina de las castañas" en alguno o varios momentos de nuestra existencia.
Ramón, que como él decía en más de una ocasión, empezó a "vivir" los sanjuanes cuando fue jurado por primera vez en 1984, de la cuadrilla de Santa Catalina, no lo dejaría ya de hacer a partir de entonces. Tanto es así que repitió como jurado de la misma cuadrilla en 2009. Le había cogido gusto y quería repetir la experiencia, para exprimirlo al máximo. Con anterioridad a todo esto tuvo que trabajar en los sanjuanes, mientras los demás disfrutábamos y gozábamos. Claro que él también lo hacía a su manera. Fue, además, miembro fundador de la Asociación Jurados de Cuadrilla y presidente de la misma.
Cada día, "el tomillo y el romero" perfumarán nuestros recuerdos. Ramón; tu aroma quedará para siempre entre nosotros entremezclado con "el tomillo y el romero que perfuman Valonsadero", como dice la que era tu sanjuanera favorita. Hasta que nos juntemos de nuevo en el cielo para recordar las aventuras y desventuras de nuestro año de jurados, 1984, y para, en unión del coro, numeroso coro de sanjuaneros que nos han precedido, entonar y cantar hasta la extenuación, la eterna sanjuanera del alma que nos une a todos los sorianos.
Hasta luego Ramón. Te esperamos junto al Árbol de la Música o allá donde actúe la Banda Municipal de Música, que era otra de tus pasiones y debilidades. Llegará San Juan y aunque tú no estés físicamente con nosotros, todos te recordaremos y en espíritu nos acompañarás.
¡¡¡Adiós, Ramón, hasta el próximo festejo sanjuanero!!! Nos dejas un buen legado; tu mujer, hijas, nietos y demás familia con savia sanjuanera.
Te recordaremos siempre: tus compañeros jurados de cuadrilla 1984.

Francisco Parra Palacios