Un centenar de personas pide la liberación de la AP-1 para evitar más víctimas mortales

Un centenar de personas ha reclamado hoy la liberalización "total" de la AP-1 para evitar que se sucedan más victimas mortales en una vía por la que circulan a diario alrededor de 9.000 vehículos.

La concentración de esta mañana ha tenido lugarjusto el sitio en el que el pasado lunes 14 perdieron la vida dos transportistas a la altura de Castil de Peone, en la provincia de Burgos.

El portavoz de la Plataforma de Liberalización de la AP-1, Rafael Solaguren, ha explicado que "si la autopista hubiera estado liberada y la bonificación de los transportistas fuera total el choque frontal no habría tenido lugar".

Para Solaguren, se trata de un accidente de tráfico que se suma, dijo, a los "muchos" que durante décadas han tenido lugar en la vía que conecta la capital burgalesa con la localidad de Miranda de Ebro, también en Burgos.

Consciente de que es un problema "de todos", lamentó que las asociaciones de transportistas no hayan acudido al acto reivindicativo pese a que los fallecidos en el último accidente fueron dos camioneros. "Nos hemos intentado comunicar con Asebutra y no hemos tenido respuesta", aseveró Solaguren, que lamentó que "no hayan querido escucharnos".

A unos meses de las próximas elecciones generales, el vecino de la N-I recordó que "llevan años solicitando que se libere la autopista de peaje porque no es de sentido común que soporte menos tráfico del que puede y una nacional tenga que soportar ese intenso tráfico, y sobretodo pesado". Asimismo, consideró que el próximo presidente debe atender a un "llamamiento de décadas" y mirar las cuentas, porque Solaguren cree que "la AP-1 está más que amortizada".

Los vecinos entienden que las mejoras que se han llevado a cabo han mejorado relativamente la siniestralidad aunque afirman que los accidentes seguirán existiendo mientras no se derive el tráfico pesado a la autopista. Por ello creen que la mejor opción pasa por bonificar en un 100 por cien a los camioneros para que puedan circular por la AP-1 sin un coste adicional".

"Lo que está claro es que esta vía no está en condiciones de soportar 9.000 vehículos diarios, la mitad de ellos camiones de forma diaria. Ni está ni muchas otras lo soportarían", aclaró.

Dos hombres de nacionalidad rumana y portuguesa, de 43 años y 50 años, fallecieron el lunes después de que los camiones que conducían chocasen frontalmente en el kilómetro 269 de la carretera N-I, a la altura de Castil de Peones. Los dos vehículos colisionaron frontalmente después de que el camionero que circulaba dirección Briviesca-Burgos invadiese el carril contrario por causas que aún se desconocen.

Los vecinos se concentraron durante cinco minutos en el el lugar en el que el pasado lunes perdieron la vida los dos transportistas. Todavía era visible el rastro del fuego que calcinó los dos vehículos en cuestión de minutos después de que chocasen de forma virulenta.