La Guardia Civil le retira las armas así como la licencia como medida cautelar.
Miembros de la Benemértia se incautaban también de siete armas, con sus guías, que posee el detenido, así como de la licencia de armas de la que dispone para cazar, como medida cautelar, según ha informado hoy la Subdelegación del Gobierno en la provincia.
Los hechos ocurrieron al mediodía del pasado sábado en el paraje La Toza, encima de Cueva Ladrona, en el término municipal de Covaleda, a los pies de la sierra de Urbión.
El celador se encontraba trabajando cuando observó un perro que llevaba un collar GPS y que estaba cazando. Como no se puede cazar en ese lugar, siguió al animal y se encontró con el propietario, que estaba de espaldas.
Allí le instó a que se volviera diciéndole dos veces "alto ahí" y, según consta en la denuncia presentada, el detenido se dio la vuelta, se encaró con el celador y le enseñó un rifle, mostrando su intención de usarlo, aunque finalmente abandonó el lugar.