El ex-ministro de Educación entre los años 2009 y 2011 señala en Soria que es preciso un consenso mayoritario en España, aunque no debe hacerse, "a toda velocidad", porque el acuerdo debe servir al menos para veinte años de sistema educativo.
El ex-ministro de Educación, Ángel Gabilondo, ha pedido este viernes en Soria un gran pacto educativo en España, aunque no debe hacerse, a su juicio, "en dos tardes y a toda velocidad", porque el consenso debe servir al menos para dos décadas de sistema educativo.
Gabilondo, que ha participado esta tarde en un foro de debate sobre la educación, promovido por el PSOE de Soria, ha asegurado a preguntas de los periodistas que no se pueden poner plazos para realizar un gran pacto por la educación porque hay que proponer un modelo "que tiene que durar veinte años por lo menos para nuestro país".
El que fuese miembro del gabinente ministerial de José Luis Rodríguez Zapatero enre 2009 y 2011 ha manifestado que falta generosidad en la clase política con el legado recibido y "con lo que queremos dejar a los que han de venir".
Además se ha mostrado partidario de sentarse a negociar seriamente y trabajar mucho para llegar a los acuerdos, porque a veces, a su juicio, falta oficio y dedicación.
"El pacto es un trabajo muy minucioso. Necesita muchas reuniones, con todos los agentes y en todas las direcciones. No creo mucho en los pactos que se hacen en un par de tardes a toda velocidad", ha recalcado.
Gabilondo ha deseado que la clase política haya aprendido algo de los cuatro meses que lleva sin firmar un pacto político para evitar que se prolongue la situación tras las nuevas elecciones generales.
"Espero que en estos meses hallamos aprendido la fatiga social que hemos producido y también que no podemos proseguir achándonos unos a otros las culpabilidades", ha señalado.
En este sentido ha pedido a los partidos que no cansen a los ciudadanos en la nueva campaña electoral responsabilizándose mutuamente de la falta de acuerdos, porque "me temo que no van a votar ni al que se exculpa ni al que inculpa, sino a otros que están más calladitos".
Gabilondo ha señalado que es necesario solventar la crisis económica y social, para "regenerar, transformar y reconstituir el país", un objetivo en el que la educación juega un papel fundamental.
"La educación espero que sea una educación para aprender a convivir en la diferencia, en el diálogo y en el acuerdo. Defiendo un pacto social y político para la educación", ha resaltado.
Gabilondo, que ha reconocido que hace falta destinar el 5 por ciento del PIB para la educación y después al 7 por ciento, ha lamentado que no puede ser que continuamente se esté abriendo el debate educativo.
En este sentido, ha calificado a la LOMCE como el "antipacto educativo", por no haberse hecho con la participación adecuada de las comunidades educativas, los agentes sociales, las familias, los profesores y los estudiantes, además del acuerdo político de los distintos partidos.
Gabilondo, que ha vaticinado que de las próximas elecciones generales no saldrá una mayoría absoluta, se ha mostrado partidario de una transición hacia una nueva legislación educativa pactada, en lugar de la derogación de la LOMCE.