Misa de “alegría” en La Soledad
Los Alcaldes de Barrio, la Corporación municipal y las peñas asisten a la ecuaristía solemne en la ermita de la Dehesa donde el presbítero anima a "poner al pie de la Virgen" los sinsabores de la vida.
"Nadie se siente fuera del corazón de María". Con estas palabras, el párroco 'in solidum' de El Espino, Rubén Tejedor, iniciaba la homilía en la solemne misa que ha tenido lugar en la ermita de la Soledad, en la alameda de Cervantes de la capital.
Una celebración a la que como es preceptivo, asistían los responsables de las doce cuadrillas de estas Fiestas de San Juan y de la Madre de Dios en el Lunes de Bailas. A la misma también acudían miembros de la Corporación municipal, peñistas y centenares de fieles.
El sacerdote ha exhortado a la alegría y al gozo no solo en tiempo festivo, sino también en el trabajo, en el ámbito familiar y en las dificultades que surgen cada día. "Hemos de poner al pie de la Virgen todas nuestras tristezas", ha invitado, explicando también que la Iglesia "tiene la palabra de alegría para la vida", y donde el "corazón de Jesucristo" es siempre un aliento ante la desesperanza.