El dinero tras las vacaciones de verano

· Cenar en casa antes de salir reduce mucho la cuenta (lógicamente). No siempre es necesario quedar a las 8 de la tarde alargando hasta la cena y lo que venga después. Si tu meta es ahorrar, siempre será mejor quedar un poco más tarde para poder tomar algo en casa y así evitar caer en tentaciones después.

· Planificarnos las salidas del mes, aunque sea un poco por encima, también ayuda mucho a nuestra economía. Para llevar esto a cabo podemos establecernos un presupuesto mensual en el que incluyamos comidas, cenas, copas y cervezas. Si a mitad de mes esa cantidad asignada al ocio se ha desvanecido, se acabarán las salidas. Puede parecer drástico pero después de uno o dos meses seguro que acabas ajustándote a tu presupuesto para que no vuelva a suceder.

· Escoger previamente los locales y bares a los que vamos a ir es un movimiento muy inteligente, así sabremos los precios de antemano y será más fácil ajustar una cantidad a gastar. Si sabemos que existe la posibilidad de que llegue un punto en el que no hagamos ni caso al dinero que nos hemos propuesto gastar, entonces será mejor salir con una cantidad limitada de efectivo y por supuesto dejar las tarjetas en casa, así no habrá sorpresas. Si existe la posibilidad de montar la reunión de amigos en una casa, mucho mejor. Los precios de las bebidas en los establecimientos suelen doblar o incluso triplicar su coste en los supermercados, por lo que si se decide quedar en una casa a la que cada uno llevará su bebida, nos ahorraremos bastante dinero.

· Debemos aprovechar las promociones, muchas veces por pereza o simple indiferencia pasamos por alto todos los cupones y descuentos que se nos ofrecen. Hay muchas páginas en internet que te permiten la aplicación de un descuento en el establecimiento sólo por efectuar la reserva a través de dicha web. También es muy habitual que tengamos tarjetas de 2x1 de algún local al que hemos ido anteriormente y las olvidemos. Las Happy Hours son otra opción que prácticamente todos los bares de copas tienen, ofreciéndote descuentos y consumiciones a mitad de precio a partir de ciertas horas.

· A la hora de pedir, siempre es mejor pagar cada consumición en al acto. De esta forma llevarás fácilmente la cuenta de lo consumido y no te llevarás una sorpresa cuando traigan la factura. Es bastante habitual lo de pagar una ronda entre amigos, pero si te has planteado llegar a fin de mes con menos gastos, intenta evitar estos derroches de generosidad o si no lo haces, asegúrate de que la siguiente ronda la pague otro.

· Si elijes vino como bebida, calcula las cantidades. Normalmente cuando se juntan más de tres personas para consumirlo conviene pedir una botella, antes que encargar copas individuales. De hecho si haces el cálculo de lo que cuesta una copa única de vino y lo que te cuesta la misma copa saliendo de una botella que pagáis entre varios, verás que proporcionalmente la cuenta sube al optar por la primera opción.

· En los grupos de amigos normalmente se acata la propuesta del primero que hable, a partir de ahora, trata de ser tú el que lleve la voz cantante. Indaga antes de quedar en qué sitios hay ofertas y promociones o precios asequibles y proponlo antes de que se te adelanten.

Siguiendo estas pautas te resultará más fácil controlar tus gastos y llegar más holgado a final de mes. De todos modos, no siempre es fácil y somos muchos los que nos llevamos un buen susto cuando nos llegan los cargos de la tarjeta. Si esto te ocurre y necesitas reponer parte del dinero gastado para otros asuntos, no dudes en solicitar un préstamo al instante, te evitarás problemas de liquidez y podrás continuar con tus gastos hasta el próximo ingreso.