Para los emprendedores es importante dar a conocer su producto o servicio al resto de personas y a la vez dentro del mismo sector comercial. A menudo una de las formas interesantes de darlo a conocer de una forma cercana es participando en ferias y congresos.
Montar un stand no es trabajo fácil, significa construir un espacio dentro de otro más grande que llame la atención. Antes de esto pero es necesario tener bien claro cuál es el mejor diseño para nosotros, el que nos permita llamar la atención de los que están en la feria, es decir, hay que diseñar un buen escaparate para que la gente se sienta atraída nada más pasar por delante de él. El objetivo es atraer a la gente para que conozcan tu producto.
Uno de los factores más importantes a tener en cuenta es la localización del stand. Seguramente las entradas de los pabellones sean los sitios con más afluencia de personas y por tanto una de las localizaciones que más te pueda interesar. También puede estar bien colocarte cerca de los espacios donde se celebran conferencias, charlas o presentaciones, puesto que en algunos momentos de la jornada estarán llenos de personas.
Debes considerar también al detalle cómo debe ser tu stand, su diseño y el espacio que ocupe. No importa si es pequeño o grande pero debe invitar a las personas a entrar en él. Tiene que ser un lugar agradable y cómodo, por eso muchas empresas se deciden por poner sillones o sofás dentro del stand. El logo es un factor fundamental que debe ocupar una parte importante dentro de la decoración de este espacio. Además el color corporativo de la empresa debería ser el que marque la decoración de tu stand.
Además de ser un espacio que atraiga a la gente, cómodo, agradable y acorde con tu marca, debe ser sin duda, el sitio donde los clientes puedan conocer lo que haces. Si lo que ofreces es un servicio, trata de traer material para que puedas explicarles de forma muy clara en qué consiste, y si se trata de objetos grandes, como un coche, trata de traer réplicas pequeñas o presentaciones para que la gente pueda comprenderlo. Lo más importante es que se hagan una idea real de lo que estás haciendo. Por eso además de las personas que suelen trabajar en ferias es importante que en el puesto haya personal de la empresa capaz de explicar al detalle en qué consiste vuestro producto y de resolver todas las dudas.