250 abulenses embarcaron a Hawai entre 1911 y 1913, donde les ofrecían trabajo, escuela y atención médica.
Un siglo después de la emigración de españoles a Hawai, donde les ofrecían trabajo y casa, un profesor estadounidense busca a familiares de aquellos emigrantes para completar un trabajo de investigación.
De los 8.000 españoles que fueron a Hawai, muchos luego fueron a otros estados, fundamentalmente a California, según el catedrático de Literatura y Cultura Española de la Universidad de Nueva York, James Fernández, que desde hace una década recoge testimonios de descendientes, fotografías, cartas, recuerdos y diverso material, dentro del proyecto Inmigrantes Invisibles. Este proyecto cuenta ya con un libro de fotografías y tres documentales.
"Cuando Estados Unidos abolió la esclavitud tuvo que salir por el mundo a buscar mano de obra para fortalecer su fuerte crecimiento económico que le llevaba a convertirse en la primera potencia mundial", explica el catedrático.
Fernández visita diferentes pueblos de la provincia de Ávila en busca de familias que coincidan con la lista del pasaje de los barcos en los que viajaron hace más de un siglo sus antepasados, con apellidos como Caamaño, Aparicio, Saguar, Tinoco, Valdés, Redondo, Villoras, Martín, Fariñas, Paredes o Cisneros.
Su visita pretende localizar familias y reunirlas en un acto que se celebrará el domingo en La Adrada, donde proyectará imágenes de las familias que se quedaron en Estados Unidos y explicará su proyecto.
'Inmigrantes invisibles' es un proyecto que tiene por objeto montar un archivo digital que documente la historia de la diáspora española a Estados Unidos a principios del siglo XX", ha señalado Fernández.