La depuradora

Sorpresa causa que el mismo día en que nuestro alcalde o alguno de sus concejales ni se presentaran a recoger de manos de la ministra de Medio Ambiente los dos premios que se nos han otorgado a los sorianos por reciclar mucho y bien, Carlos Martínez nos cuente que se reunirá con la ministra Tejerina para "exigir" que se lleve adelante el proyecto de la depuradora. Da risa esta exigencia actual, cuando tan poco exigente fue consigo mismo en la pasada legislatura, cuando esa misma depuradora llegó a estar incluso adjudicada, con una financiación del 80/20, 80% Europa y 20% Ayuntamiento, mientras que ahora los proyectos que financia Europa solo serán subvencionados al 50%. Es difícil de entender cómo, si antes no quiso nuestro alcalde llevar el proyecto a cabo, no quiso o no pudo, puesto que los 12 millones de la empresa mixta del agua han sido dilapidados en obras tan de relumbrón como de dudosa necesidad, ahora quiera ponerse manos a la obra con un futuro financiero claramente negativo respecto al anterior. Soria, cabecera del Duero, está depurando mal, y de mentira . De ocultación de la verdad califica ASDEN la manera de enfocar el problema de la depuradora por parte de nuestro Ayuntamiento, mientras éste acusa a la asociación ecologista de dinamitar a Soria y al sorianismo por contar verdades como puños, verdades en forma de vertidos fecales al río Duero. Algo huele mal, y nunca mejor dicho, en este show de Truman que nos han creado, y en el que todo funciona aparentado. Abriremos los ojos y nos daremos cuenta que todo es de cartón-piedra: buen escenario, buenos actores y mucha comedia. Mentiras de cartón-piedra.