El joven soriano Alejandro Puerta Cantalapiedra impulsó la creación de la Joecom durante su segundo curso universitario en Madrid. La orquesta, que cuenta en la actualidad con 80 componentes, actuará el próximo 2 de marzo en el Auditorio Nacional, con un concierto que unirá música y nuevas tecnologías para llegar a los más jóvenes.
El soriano de 22 años llegó a Madrid en el 2012 para comenzar sus estudios de arquitectura en la Universidad Politécnica de la ciudad. Tras un año fuera de su casa, y terminados ya sus estudios de piano en el Conservatorio Oreste Comarca, el joven se dio cuenta de que su gran pasión había pasado a un segundo plano. "En este momento, me planteé algo para seguir con la música. Pensé que seguramente más jóvenes estaban en la misma situación, y se me ocurrió formar una orquesta".
Pero cuando un proyecto tiene alma, avanza, y un curso más tarde la Joecom ya contaba con 20 jóvenes dispuestos a "difundir la música y generar una especie de movimiento", que creció en Madrid, pero puede trasladarse a otras ciudades universitarias como es el caso de Zaragoza.
Ahora, estos 80 jóvenes, provenientes de 26 puntos de España diferentes, están a punto de encarar su mayor desafío, la actuación en el Auditorio Nacional, que Alejandro describe como "el Bernabéu de la música". Una oportunidad única que les ha costado mucho esfuerzo y dedicación conseguir, y que "nunca se sabe si se volverá a repetir".
Una orquesta nacida y formada por jóvenes, en su 95%, tiene que tener algo innovador, y con este objetivo se creó la Joecom, que pretende hacer llegar la música clásica a los jóvenes, revolucionando el modelo de concierto visto hasta ahora. "Los conciertos de música clásica están llenos de gente entendida y mayor, y eso está bien, pero falta juventud, que al fin y al cabo es el futuro público".
Un propósito que consiguen a través de las nuevas tecnologías con la utilización de pantallas para proyectar información de las obras que interpretan, y permitiendo el uso de dispositivos móviles durante los conciertos. "Creamos un hashtag para que la gente comparta las fotos, comentarios o vídeos que realicen durante el concierto". Además, cada uno es libre de elogiar el trabajo de la orquesta cuando quiera, porque como el joven director comenta "la música no es estar callado durante 40 minutos y luego aplaudir. La música transmite emociones y otro tipo de cosas que también tienen que estar intrínsecas en el propio espectáculo".El repertorio de la Joven Orquesta de Estudiantes y Colegios Mayores se estructura en tres pilares. El primero, el reclamo para ese público joven que buscan en sus conciertos, la música de bandas sonoras como la de El Señor de los Anillos o Juego de Tronos; melodías que gustan y que son la llamada para que la juventud descubra la música clásica, que "está presente en nuestras vidas, como en anuncios, pero nunca nos paramos a escucharla".
Y el tercer pilar de la oferta musical de la agrupación, el estreno de obras de compositores españoles jóvenes, porque como señala Cantalapiedra, "el presente y el futuro de la música reside en ellos". Además de ser muy gratificante para los jóvenes músicos "compartir con ellos, aprender de ellos, y sobre todo, interpretar su música para que sea escuchada ahora mismo".
Con ellos viaja el valor de la solidaridad. Son jóvenes, universitarios y amantes de la música, a la cual probablemente la mayoría no se va a dedicar profesionalmente, y por eso, todo lo que recaudan en sus conciertos se dona a diferentes ONGs para que "lo puedan reinvertir en cultura y llegue a la clases más desfavorecidas. Queremos que la cultura vuelva a estar latente en la sociedad a todos los niveles".
Así ocurrirá tras la actuación en el Auditorio, donde todos los fondos que se consigan irán destinados a Unicef y a la ONG Voces, que invertirá el capital en un festival de cine celebrado en la Cañada Real de Madrid, en el que también estará la Joecom acompañando con su música.
Este es el título del concierto que la joven orquesta presentará en el Auditorio el 2 de marzo a partir de las 19:30 horas, y que coincide con el nombre de la obra central del espectáculo, compuesta por el español Juan Antonio Simarro. Una creación inspirada en diversas bandas sonoras y que "pone en valor el hecho de la música y la cultura como erradicadores de la pobreza". Durante la primera parte 110 voces acompañarán a la Joecom, que terminará la actuación de la manera más especial. "En la segunda parte es cuando me enfundo la chaqueta de roquero y empiezo a hacer de showman. Subimos a gente al escenario para que participe". Ésta, otra de las señas de la Joecom.