Los Presupuestos

Dicta el refranero popular que hechos son amores, que no buenas razones. En política, donde por pura idiosincrasia de la cosa pública abundan las buenas razones los hechos se cuentan en millones. Pues bien, los Presupuestos Generales del Estado vienen cargados de poco amor para nuestra provincia. Los PGE recogen 60 millones para Soria de los que casi la mitad son para una Autovía del Duero de la que se retrasan los plazos de ejecución. FOES ha calificado esas partidas de “ridículas” y razón no le falta; ni rastro de la Autovía a Navarra, 0€ para mejorar la conexión ferroviaria con Madrid y 1,7 M€ para equipar una cárcel que aún no sabemos para qué se usará. Y, por supuesto, nada de lucha contra la despoblación.

Dirá el lector, con acierto, que se trata del proyecto del PGE por lo que aún pueden cambiar. Lo malo es que ese cambio está en manos del PNV, por lo que si sufren alguna variación sustancial tengan por seguro que no será positiva para nuestra provincia.

Los presupuestos presentados por Montoro suponen disminución de la inversión y aumento del gasto público. Se aumenta la insostenible estructura del Estado, con lo que se mantendrá el endeudamiento que ya supone el 100% del PIB, mientras la inversión productiva cae en picado (un 10.9% las infraestructuras y un 11% las partidas dedicadas a comercio, pymes y turismo).

El papel del Estado no debe ser generar puestos de trabajo, aunque lógicamente deba tener el personal suficiente para su funcionamiento y garantizar la prestación de los servicios públicos, sino poner las condiciones necesarias para el correcto funcionamiento de la economía. Y las condiciones son tan sencillas como garantizar la seguridad jurídica, implantar las infraestructuras necesarias para el desarrollo de la actividad económica, no asfixiar a las empresas y –sobre todo- dejar todo el dinero posible en las manos de los ciudadanos. Justo lo contrario de estos Presupuestos que, por cierto, cuentan con el apoyo de los liberales de Ciudadanos.