Culminan en Pinares las pingadas de los Pinos Mayo extendidas durante tres días
Los vecinos de Cabrejas del Pinar, Molinos de Duero, Navaleno y San Leonardo reviven el rito el 1 de mayo, siguiendo la actividad ya iniciada el sábado 29 y domingo 30 en Casarejos, Covaleda, Santa María de las Hoyas y Salduero.
El grupo de 'Mozos que pingan el Mayo en San Leonardo' acompañados por vecinos de San Leonardo de Yagüe y visitantes de la población han vuelto a revivir el rito en la céntrica Cuesta del Mayo, en uno de los días que, junto con la Matanza del cerdo al aire Libre, y las fiestas patronales de febrero y julio, suponen la mayor concentración de gente en la población.
Tras la traída del pino, ayudados por los bueyes, el escenario del día se centró en La Cuesta del Mayo. Los jóvenes fueron tomando posiciones, primero sentados, y más tarde levantando el pino con las ayudas de las tijeras de madera y las sogas hasta conseguir mantener erguido el pino que permanecerá en el enclave durante el mes de mayo.
Al otro lado de la travesía, las mujeres de la Asociación Virgen de la Vega aprovecharon la concentración de gente para la venta de dulces caseros y manualidades. Una iniciativa que siempre en esta fecha, busca obtener fondos para ayudar a entidades benéficas, siendo en este caso la asociación Signo de Vida la entidad destinataria de la recaudación.
Por su parte los mozos compartieron una comida comunal al finalizar el rito de la mañana que, este año, volvió a tener una importante repercusión mediática.
La pingada del pino mayo en el terreno municipal ubicado junto a la calle Cañada Real de Navaleno, en la antigua subida a El Raso, ha cerrado el programa de dos días que arrancaba en la tarde del domingo día 30 con la traída del pino mayo desde el monte, realizando distintas paradas y con la entrada en el núcleo de población pinariega ya de noche como se suele hacer cada año.
A diferencia de otras poblaciones de la zona, en Navaleno no se utiliza la ayuda de los bueyes, y son los propios mozos quienes, ayudados por las cuerdas, consiguen transportar el pino desde el monte hasta el lugar de la pingada.
Pasadas las 13:00 horas del lunes día 1, el pino se levantó con la ayuda de las tijeras de madera y las sogas ante la atenta mirada de vecinos y gente que pasa el puente festivo.En poco más de una hora, el pino ya permanecía erguido. Posteriormente, el grupo colaborador disfrutó de una caldereta en el parque de La Dehesa Nueva.
En Molinos de Duero se revivió la tradición con la traída del pino con los bueyes, y su pingada en la plaza, frente a la iglesia parroquial, donde permanecerá hasta finales del mes de agosto.
En Cabrejas del Pinar el lunes día 1 se pingaba el pino mayo, previsto para el domingo 30 de abril, y que no se pudo llevar a cabo debido a la intensa lluvia de la mañana. El pino ya permanecía en el lugar de costumbre, detrás de la iglesia parroquial.