Desde emergencias se muestran satisfechos con el balance y esperan que todas las fiestas sean así de tranquilas.
De los 30 pacientes, siete han tenido que ser trasladados al hospital Santa Bárbara.
Ninguno de los atendidos lo ha sido por asta de toro; aunque sí ha habido dos que han sido derivados por varias lesiones producidas por contacto con los novillos. Uno de ellos con una brecha.
Las otras cinco personas llevadas al Santa Bárbara no revestían gravedad pero sí algún tipo de intervención o prueba médica más en profundidad que aconsejaba su realización en el centro médico.
Así, los 23 pacientes restantes han sido todos atendidos por causas de carácter leve como picaduras, alergias o pequeñas contusiones.