Fosas comunes

No podía pasar sin aprovechar mi columna para agradecer a la Asociación de la memoria histórica su labor encontrando al que fuera Vicepresidente de la Diputación Provincial y otros cuerpos de fusilados en las cunetas de nuestra provincia.

Con esa labor contribuyen a dar sosiego las familias de los asesinados, y hacen que recordemos todos esa barbarie que fue la guerra civil y que empezó, como ahora en Cataluña, saltándose unos la Ley establecida. No quiero establecer comparación con los hechos que ocurren ahora pero si recordar que la contienda fue por un golpe de estado de Franco y sus generales saltándose la Constitución.

Espero que Ivan Aparicio siga trabajando por la Memoria Histórica y haciendo esa labor tan buena. Esta vez lo hizo con ayuda de la Diputación y es justo reconocérselo.

Y espero también que ahora, los políticos y partidos de izquierdas en los que me encuentro empecemos nuestra labor de búsqueda y desentierro también.

Es hora de desenterrar los derechos de los trabajadores cercenados por los gobiernos desalmados de la derecha de este país.

De desenterrar el poder adquisitivo de nuestros pensionistas, de desenterrar los derechos en sanidad que los ciudadanos teníamos en este país.

De desenterrar la educación gratuita y pública.

Y de echar en esas fosas la corrupción, y a los políticos que meten la mano al cajón y adjudican servicios públicos a sus amigos de la escuela, a sus primos y familia.

No habrá memoria histórica hasta que nuestras cunetas estén libres de fosas, y no habrá prosperidad hasta que no vuelvan los derechos sociales y laborales. Así que no nos mientan con falsos cantos de sirenas, ¿o no?