Tolerancia

Cuantas veces te has callado últimamente por no discutir, por no liarla, cuantas veces te dan un desplante y te callas, recibes una mala respuesta y te callas, cuantas veces en la sobremesa alguien pretende tener la razón a toda costa y convencerte de que sus ideas son las mejores, y te callas, aunque a veces casi te traten de tonto, pero te callas. Cuantas veces has evitado hablar de política porque existe la tendencia por parte de algunos que se creen con la verdad absoluta de intentar convencerte con vehemencia de que tienen la razón verdadera y tú eres un retrogrado, pero te callas. Cuantas veces has evitado mostrar tus ideas religiosas en los últimos años para evitar polémicas, como si tuvieras que dar explicaciones por tu pertenencia a un credo o religión. Cuantas veces has tenido que ocultar públicamente tu tendencia de voto en los últimos años para que no te señalaran o poco menos te vapulearan. Cuantas veces has evitado entrar en polémica en las redes sociales, aunque estés leyendo barbaridades que afectan a tus principios, pero mueves la cabeza y dices bahh, para qué y te callas. Cuantas veces has evitado mostrar cualquier signo de tu país, de tu himno o tu bandera por no provocar.

¿Cuántas veces..?, muchas son las veces que en este país la gran mayoría silenciosa ha tolerado, transigido y aceptado otras ideas y seguramente esa ha sido la base de la convivencia de la actual Constitución del 78. Han sido muchos años de silencio de la gran mayoría que tenia por bandera madrugar todos los días para ir a trabajar y sacar una familia y unos hijos adelante, su himno diario ha sido la educación de los hijos y en definitiva vivir en paz. Pero da la sensación que ya no es suficiente con la aceptación de las ideas del contrario, no, ahora te las quieren imponer y ese precisamente es el límite. Porque sin darte cuenta, callando, al final el intolerante pretende imponer sus valores y su principios sobre los tuyos, así sin más, porque son los que más gritan ,o los que más participan en las redes sociales, o los que más se manifiestan…y sin darte cuenta resulta que el marginado eres tú.