Lolita, el bar que revolucionó la noche soriana, cumple 4 años

En el año 2.013 un pequeño local abría en la Calle Caballeros de la capital soriana. Se trata del primer bar LGTBI (Lesbianas, Gais, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales) y abría sus puertas en Soria condenado al fracaso en una ciudad pequeña y aparentemente cerrada como la nuestra. 4 años después Lolita no solo no ha cerrado sino que se ha mudado a un local mucho más grande y céntrico y tiene una agenda repleta de actividades.

¿Qué hace diferente al Lolita? Jaime apunta que “tratamos de hacer todo con mucho cariño” y una apuesta decidida por “no ser solamente un bar, queremos formar parte del día a día y de todo lo que se haga en la ciudad”. “Intentamos aportar algo a la ciudad” asegura y pone como ejemplo que esta misma noche, del miércoles 15, se proyectan allí los cortos para la diversidad del Certamen Internacional de Cortos de Soria.

“Somos el bar de la diversidad en Soria” señala Jaime, en Lolita da igual la condición sexual pero también la edad, la raza o los gustos. “Cuando llegamos no había ningún espacio en Soria para el colectivo LGTBI” señala y ellos quisieron coger esa bandera y ondearla bien alto. Eso no le ha cerrado puertas, más bien al contrario y presume “todos los representantes políticos de Soria son clientes activos del Lolita”. “Lo que intentamos es que todo el mundo interactúe con todo el mundo y se lo pase bien” señala.

Jaime llegó a Soria en 2013 con su pareja y rápidamente se convirtieron en la cara y la voz del movimiento LGTBI en Soria. “En estos 4 años la sexualidad se vive de una forma mucho más relajada en Soria” constata. Cada año celebran el orgullo y cada año se suma más gente.

“Soria se vende muy mal” lamenta Jaime para señalar que “la sociedad soriana es mucho más abierta de lo que se dice”. Recuerda sus comienzos en la ciudad y los malos augurios que se esfumaron pronto. “Habrá una parte que no, como en cualquier sitio…” reconoce y aprovecha para volver a denunciar la rotura de los bancos con la bandera arcoíris que se pintaron en la Dehesa el día del Orgullo. “Solo ha quedado uno, como representación” lamenta.

Cambio de local

De aquel emblemático y reducido local donde apenas entraban una veintena de personas en la calle Caballeros, Lolita se mudó hace unos meses a un espacio mucho más grande. El lema “Lo que pasa en el Lolita se queda en el Lolita” y la decoración se trasladaron pero replicar el espíritu era algo más complicado. “Quizá hayamos perdido un poco de proximidad” señala Jaime que apunta “antes cada cliente era el local” ahora, con mucho más espacio y mucha más gente, “es más complicado aunque intentamos seguir formando parte de la fiesta de cada uno”. Un dato resume el cambio, antes una noche normal había un camarero, ahora son 5.

Cuarto aniversario

Las actividades del cuarto aniversario comienzan el miércoles con la proyección de los cortos por la diversidad dentro del Certamen Internacional de Cortos de Soria. El jueves y viernes habrá fiesta por la noche con la presencia de varios Drag Queens madrileños. Para el sábado, el día más intenso han preparado un vermút torero con la presencia de Leticia Sabater. La polifacética artista es la segunda vez que viene a Soria ya que “representa muy bien el espíritu del Lolita” asegura Jaime “a ella le da todo un poco igual, solo quiere pasárselo bien y pasa de los prejuicios de los demás”. Por la tarde la fiesta continuará con la batucada Bloko U-Kê y se alargará por la noche hasta que el cuerpo aguante. “Estas fiestas no siempre son rentables” señala Jaime “pero es nuestra forma de devolver a la ciudad algo de lo mucho que nos ha dado”. Y más cuando se trata de celebrar el cuarto aniversario.