La Comunidad participará así mismo en la redacción de nuevas directrices interpretativas de una guía en la materia que data de 2007.
Castilla y León se ha comprometido a elevar a la Unión Europea medidas de gestión del lobo para hacer compatible la conservación de esta especie con la ganadería extensiva con el fin de contar con el 'plácet' de la UE a la hora de aplicarlas, al tiempo que participará en la redacción de las nuevas directrices de interpretación de una guía europea en la materia que data de 2007.
Son algunos de los compromisos que adquiría el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante el encuentro mantenido este martes con el director general de Medio Ambiente de la UE, Daniel Calleja, con quien ha analizado el Plan de Acción para la naturaleza, las personas y la economía y la gestión del lobo al sur del Duero.
Tras la reunión, el consejero, en declaraciones recogidas por Europa Press, se felicitaba porque, entre otros acuerdos, Castilla y León podrá participar con sus aportaciones en la actualización de una guía que data de 2007 con 37 medidas de gestión del lobo, dentro de las cuales la Junta entiende que los grandes carnívoros han de tener un "tratamiento específico", y además podrá elevar consultas a la Comisión Europea sobre posibles medidas de gestión de esta especie para así poder contar con mayor "seguridad jurídica" a la hora de aplicarlas.
Y todo ello a partir del hecho inamovible de que el lobo "nunca será objeto de caza al Sur del Duero" al encontrarse protegido por una directiva comunitaria, de ahí que, como así ha explicado el consejero, lo único que se puede estudiar es aplicar medidas para "manejar adecuadamente esa especie a fin de que su conservación sea compatible con la ganadería extensiva", algo que en la actualidad está provocando serios problemas en forma de bajas de ganado en algunas provincias como Ávila, Segovia, Salamanca y Sur de Zamora.
"La ganadería extensiva es un elemento socioeconómico y cultura que hay que respetar y que permite además la correcta gestión del territorio", apunta Suárez-Quiñones, quien recuerda que el problema del lobo es un "problema europeo, no sólo de Castilla y León", en referencia a que también genera importantes conflictos en otros países como Francia o Alemania.
Por tal motivo, la UE ha recogido hasta un total de 37 medidas preventivas en la referida guía de 2007 que, según el consejero castellanoleonés, van a ser estudiadas en Castilla y León y reactualizadas para ver si son aplicables a nuestro modelo territorial.
"Si a pesar de todo, vemos que esas medidas no triunfan, habrá que estudiar otras formas de reducir la densidad de lobos en determinados lugares", indica Suárez-Quiñones.
Este ha anunciado además que la Junta participará en distintos ámbitos y foros regionales en los que se debata con los sectores implicados sobre este problema, además de participar en programas LIFE específicos financiados para conocer la mejor forma de gestionar este ámbito.
El encuentro mantenido por el consejero en Bruselas se traducirá próximamente en la convocatoria de nuevas reuniones con la Mesa del Lobo y las organizaciones implicados al objeto de analizar todas estas cuestiones en el ámbito de la UE.
En materia indemnizatoria, el titular de Fomento y Medio Ambiente recuerda que el pasado año se puso ya en marcha un nuevo sistema que permita agilizar los pagos en un periodo no superior a un mes, cuando antes se tardaba cerca de un año, y ha anunciado que en el primer semestre del presente año espera llegar a un acuerdo sobre el importe de cuantías en función del animal, tipo de ataque...a la hora de determinar el lucro cesante más justo.
La visita de Suárez-Quiñones a Bruselas se produce en el marco de un proceso que comenzó con un primer desplazamiento a primeros de 2017 en el que, al amparo de un Plan de Acción puesto en marcha por la UE para reducir los conflictos provocados por el lobo, Castilla y León adquirió el compromiso de facilitar en esta Comunidad un encuentro de expertos comunitarios en la materia que se celebró los pasados días 23 y 24 de octubre con el objeto de analizar la compatibilidad de la especie con la ganadería extensiva.
La experiencia, que se tradujo en encuentros de los expertos con los sectores implicados y visitas a las zonas más conflictivas, ha sido precisamente calificada de "extraordinaria" por el director general de Medio Ambiente de la UE, Daniel Calleja.