La Junta invertirá casi 0,2M€ en el mantenimiento de los espacios naturales de Soria
Una imagen de archivo del Cañón del Río Lobos. /SN
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente adjudica el servicio a la empresa Viveros Eskalmendi para los próximos veinte meses.
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha adjudicado a la empresa Viveros Eskalmendi, S.L., por un importe total de 198.079,21 euros, el servicio para la conservación, el mantenimiento y reparación de las infraestructuras de uso público de los espacios naturales de la provincia de Soria para un periodo de 20,5 meses, en los años 2018 y 2019.
Las labores de mantenimiento se centrarán, principalmente, en los cinco espacios naturales declarados en la provincia de Soria: Parque Natural del Cañón del río Lobos (1985), Monumento Natural de La Fuentona (1998), Reserva Natural del Sabinar de Calatañazor (2000), Reserva Natural del Acebal de Garagüeta (2008) y Parque Natural de la Laguna Negra y Circos Glaciares de Urbión (2010), así como en los espacios de la Red Natura de la provincia, si se estimase necesario. Se excluyen los centros de acogida de visitantes, excepto el mantenimiento de las zonas ajardinadas de sus entornos.
Se intervendrá fundamentalmente en tareas conservación, reparación y mejora de diversas infraestructuras: señalización, puntos de información y de observación de fauna, miradores, áreas recreativas, aparcamientos, espacios dedicados a la recogida de basuras, caminos, sendas de montaña e interpretativas, refugios de montaña y de pescadores, fuentes, pozas y riberas, patrimonio etnográfico, etc. También se realizarán labores de limpieza y mantenimiento del medio natural, trabajos en el arbolado, tratamientos fitosanitarios, o apoyo a las labores de vigilancia, información y control de accesos.
Se realizará una revisión y actualización del inventario de los equipamientos de uso público de cada espacio, así como de las áreas recreativas. Además, se sustituirán aquellas infraestructuras de uso público en caso de que no sea posible su reparación, se realizarán adecuaciones o nuevas infraestructuras que se consideren necesarias y se retirarán los elementos instalados que estén fuera de uso y tengan una incidencia notable sobre el paisaje.
Para la realización del servicio se mantendrán dos cuadrillas de un mínimo de tres trabajadores (un capataz y dos peones). En un principio se asignará una al Cañón del río Lobos, La Fuentona y el Sabinar de Calatañazor y otra a la Laguna Negra y el Acebal de Garagüeta. Los trabajos serán coordinados y dirigidos desde el Servicio Territorial de Medio Ambiente.
Preservar los espacios protegidos
El uso público de los Espacios Naturales Protegidos (ENP) de Castilla y León es uno de los pilares básicos de su gestión. Son espacios vivos, en los que conviven la naturaleza en buen estado de conservación con las tradiciones de las personas que en ellos habitan y con los visitantes. Por ello, cuentan con numerosas infraestructuras de uso público, construidas al amparo del programa parques de Castilla y León, que compatibilizan los objetivos de conservación de los Espacios Naturales Protegidos con la oferta de un contacto íntimo con la naturaleza.
La ‘Carta europea del turismo sostenible en los espacios naturales protegidos’ reconoce la importancia del turismo como elemento para sensibilizar al gran público sobre el respeto al medio ambiente y servir, al mismo tiempo, como sector con un fuerte potencial de apoyo a las actividades económicas tradicionales y la mejora de la calidad de vida. No obstante, para responder a las exigencias específicas de los espacios protegidos como a las expectativas de los turistas, es primordial que el turismo preserve el patrimonio sobre el que fundamenta su actividad, y para ello hay que hacer intervenciones de gestión y mantenimiento.
Tras su declaración, en las distintas fechas, en los cinco espacios protegidos de la provincia, la Junta de Castilla y León viene realizado actuaciones de mejora para la atención a los visitantes, incluida la dotación de diverso equipamiento, promoviendo de esta forma el acceso y recorrido por los mismos, lo que ha supuesto un importante incremento de turistas. En 2017, el número estimado (aforadores) de visitantes a estos espacios ascendió a unas 400.000 personas, casi 25.000 más que en el año anterior.
Con estas intervenciones se pretende favorecer el empleo local y mejorar las condiciones de vida de la población residente, prioritariamente en sus zonas de influencia socioeconómica, como fórmula más adecuada para conseguir la conservación de los espacios.